Encuentro empresarial organizado por Fundación SAMU

SAMU fomenta el diálogo entre empresarios y jóvenes migrantes

Fundación SAMU, a través del área de Cooperación Internacional, Acción Humanitaria y Educación para la Ciudadanía Global, y en colaboración con el Ayuntamiento de Sevilla, celebró el 18 de noviembre un encuentro empresarial para la inclusión laboral de jóvenes inmigrantes. El evento, que se enmarca dentro del proyecto Ciudadanía Global: Conociendo Nuestra Vecindad-Polígono Norte, tuvo lugar en la sede de la Fundación MAS en Sevilla y reunió a empresarios, jóvenes migrantes y representantes de la comunidad local para dialogar sobre cómo el sector empresarial puede ser un motor de inclusión social y laboral.

El encuentro se centró en explorar cómo las empresas pueden contribuir a la Agenda 2030, especialmente en los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) relacionados con la inclusión laboral, la reducción de desigualdades y el trabajo decente. Durante la jornada, se presentó un diagnóstico del Polígono Norte, un barrio sevillano con alta concentración de población inmigrante, que expuso las barreras a las que se enfrentan los jóvenes migrantes para acceder a empleos dignos y formaciones adecuadas.

El diagnóstico, basado en encuestas y grupos focales, destacó que el 78% de las personas migrantes de este barrio sevillano se enfrentan a serias dificultades para encontrar trabajo. Sin una documentación legal adecuada, muchos se ven empujados hacia actividades precarias o ilegales, lo que no solo afecta su bienestar, sino que también pone en riesgo la cohesión social del barrio.

La inclusión laboral no solo beneficia a los jóvenes migrantes, sino también a las empresas. Según datos presentados durante el encuentro, las organizaciones que apuestan por incorporar a personas migrantes en condiciones dignas tienen un 80% más de retención laboral en comparación con el promedio. Además, la diversidad en el entorno laboral fomenta la innovación, mejora la reputación corporativa y abre puertas a incentivos gubernamentales.

Uno de los momentos más significativos de la jornada fue el diálogo directo entre empresarios y jóvenes migrantes. Los testimonios de estos jóvenes ofrecieron una perspectiva única sobre los retos que enfrentan y las aspiraciones que los impulsan. La interacción no solo rompió barreras, sino que también permitió a las empresas comprender mejor cómo pueden apoyar a este colectivo.

El Polígono Norte, conocido por su diversidad cultural y social, fue el punto central de este encuentro. En este barrio, el 45% de los residentes son inmigrantes, lo que subraya la necesidad de fortalecer las oportunidades formativas y laborales para promover la integración. Desde Fundación SAMU, se destacó que la inclusión laboral de los migrantes no solo desmonta prejuicios, sino que también construye puentes hacia una comunidad más cohesionada.

El evento, que contó con el apoyo del Ayuntamiento de Sevilla, culminó con un llamamiento a la acción. Fundación SAMU instó a las empresas a asumir un papel más activo en la construcción de una sociedad inclusiva, no solo como una responsabilidad social, sino como una oportunidad de crecimiento mutuo. Además, se planteó la necesidad de reforzar la colaboración entre instituciones, empresas y entidades sociales para garantizar que las iniciativas tengan un impacto real y sostenible. “La inclusión laboral no es una opción; es una necesidad para construir un futuro más justo y próspero para todos”, afirmó uno de los organizadores en el cierre del evento.

Este encuentro no solo marcó un hito en el compromiso de Fundación SAMU con la inclusión laboral, sino que también demostró cómo la colaboración entre el tejido empresarial y social puede transformar comunidades enteras.25

Voluntarios de SAMU en Valencia tras el paso de la DANA.

SAMU en Valencia: historias de barro, resiliencia y esperanza

El 29 de octubre, la Comunidad Valenciana fue azotada por una Depresión Aislada en Niveles Altos (DANA) que dejó una estela de destrucción y dolor sin precedentes en la historia reciente de nuestro país, y cuyos efectos seguirán vigentes durante un tiempo por determinar. Las lluvias torrenciales y los desbordamientos de ríos afectaron gravemente a municipios como Catarroja, Picanya, Paiporta y Utiel. Las infraestructuras colapsaron y las viviendas quedaron sumergidas bajo el agua. Hasta el 26 de noviembre, las autoridades habían confirmado 221 víctimas mortales en la provincia de Valencia.

«Aquello era una película de miedo. En la zona cero, la gente gritaba y todo estaba lleno de barro. Había destrucción mirases por donde mirases. Me impactó mucho aquel paisaje tan desolador», explica Manuel Orozco, uno de los voluntarios del primer equipo que Fundación SAMU desplazó hasta la Comunidad Valenciana para ayudar a los afectados por la peor DANA del siglo. «Antes de llegar había visto muchas noticias e imágenes en las redes sociales, pero aquello había que verlo para creerlo».

La psicóloga María Casado, otra de las voluntarias de Fundación SAMU, coincide con su compañero en que «la realidad superaba con creces todas las noticias» que les llegaba a través de las redes sociales o los medios de comunicación. «El paisaje era desolador. Parecía que estábamos en guerra y que se había detenido el tiempo», reconoce Casado, que participó en el segundo contingente que activó la organización. «A pesar de que yo llegué en el segundo equipo, diez días después de la DANA, parecía que la gran riada había ocurrido el día anterior».

La magnitud de la tragedia ha movilizado a miles de voluntarios que, desde el primer momento, se han volcado en las labores de rescate, limpieza y apoyo a los damnificados. La respuesta solidaria ha sido masiva, con ciudadanos de toda España desplazándose a las zonas afectadas para brindar su ayuda, entre ellos profesionales de Fundación SAMU.

La misión

Un equipo de once voluntarios especializados en emergencias sanitarias y protección civil de SAMU partió el 31 de octubre de Gelves (Sevilla) con dirección al municipio de Utiel para ayudar a las comunidades afectadas.

SAMU activó un gabinete de crisis el martes 29 de octubre por la noche, cuando empezaron a llegar las alertas del desastre desatado esa misma tarde por las fuertes lluvias. En la mañana del miércoles día 30, la organización empezó a coordinar los preparativos para una posible misión de emergencia y a movilizar a sus profesionales y a los alumnos de Escuela SAMU. Y por la noche, la dirección de SAMU tomó la decisión de enviar un dispositivo a Utiel para atender el llamamiento de auxilio realizado por su Ayuntamiento. Utiel, con 11.000 habitantes, fue uno de los municipios más afectados por las riadas e inundaciones. Las lluvias asociadas a la DANA provocaron el desbordamiento del río Magro. Las imágenes de puentes destruidos, carreteras levantadas, barrios devastados y rescates al límite han dado la vuelta al mundo.

Este primer equipo que se desplazó al levante español estaba formado por once personas, bajo el mando de Sergio Vitrián, experto en protección civil. Viajaban profesionales con diversos perfiles: enfermería, técnico en emergencias sanitarias, bomberos y especialistas en emergencias sanitarias y protección civil. El convoy contaba con dos vehículos todoterreno, un puesto de mando 4×4 y una UVI Móvil, además de material de intervención logística.

El gabinete de crisis de SAMU estaba en contacto con las autoridades tanto de Andalucía como de Valencia, así como con otras organizaciones de emergencias, en una situación en el que todos los recursos se vieron desbordados para determinar las zonas prioritarias de actuación y para identificar los espacios y las tareas en los que se requería asistencia.

Cuando el equipo de SAMU llegó a la zona se encontró con numerosos recursos y efectivos, pero faltaba coordinación. Por esta razón, en un primer momento, SAMU llevó a cabo funciones de coordinación de emergencias y, posteriormente, se desarrollaron labores de asistencia sanitaria casa por casa y de logística y rescate. «Era necesario coordinar todos los recursos. Había muchas manos, pero faltaba coordinación. Yo fui el responsable de organizar los diferentes profesionales que acudían de manera voluntaria, como enfermeros, bomberos, electricistas, fontaneros o cerrajeros. Estos últimos eran muy importantes, pues había numerosas casas cerradas y sus propietarios no tenían forma de entrar en ellas», comenta Manuel Orozco, responsable de logística del primer contingente de SAMU y alumno de ciclo de FP de Técnico de Emergencias Sanitarias de Escuela SAMU.

«En la vida trabajamos y nos esforzamos para tener una casa y un coche, y aquellas personas lo habían perdido todo en cuestión de minutos. Vieron desaparecer su casa y su coche delante de sus ojos sin poder hacer nada, porque, si intentaban evitarlo, podían perder su vida», continúa Orozco.

Este profesional recuerda ya en Sevilla cómo los vecinos de Utiel trataba a los voluntarios de SAMU como héroes sólo por el hecho de ayudarles. «Es algo que no se puede explicar. Nosotros hacíamos nuestro trabajo, pero para los vecinos de Utiel era mucho más. Les llamaba la atención que un grupo de personas vinieran desde Sevilla, siete horas en coche, a ayudarles», apunta Orozco, que también participó este verano en el dispositivo de emergencias de Ceuta que SAMU activó ante la llegada masiva de personas migrantes.

Tras una semana en Utiel, Fundación SAMU envió un segundo equipo de 14 voluntarios formado por cuatro psicólogos, dos enfermeros, ocho técnicos de emergencias sanitarias y expertos en protección civil al municipio de Catarroja como respuesta a la demanda de apoyo formulada por las autoridades locales y regionales que estaban al frente de la gestión de la emergencia.

Este equipo multidisciplinar dio el relevo al primer contingente enviado por SAMU al municipio de Utiel, que regresó a la base el 2 de noviembre.

El nuevo dispositivo tenía como objetivos proporcionar primeros auxilios a la población; proporcionar equipo de protección individual (EPIs) y atender a aquellas personas afectadas por la propagación de enfermedades transmisibles; colaborar en la gestión, almacenamiento y transporte de los centros de recepción de alimentos en el municipio de Catarroja; y proporcionar apoyo psicológico fijo y móvil ante la posible alta demanda por parte de la población afectada por la DANA. La misión se prolongó durante 10 días.

«En cuanto llegamos nos pusimos al servicio de las autoridades locales para dar apoyo psicológico. Por un lado, realizábamos el seguimiento de casos que ya estaban identificados por los servicios sociales, y, por otro, detectábamos casos nuevos», explica la psicóloga María Casado.

«Los afectados por la DANA necesitaban hablar, alguien que les escuchara. Cuando hay una catástrofe de estas características, si no hay pérdidas humanas en nuestro entorno más cercano, sólo pérdidas materiales, decimos que estamos bien, pero no es verdad», continúa Casado. «Nos hemos encontrado con personas muy resilientes, especialmente las personas mayores, muchas de las cuales vivían en plantas bajas y se habían refugiado en las casas de sus vecinos o llevaban hasta diez días sin poder salir de sus viviendas. Muchas personas mayores, que ya habían vivido una riada anterior en los años 50, nos dijeron que la de 2024 había sido mucho peor».

Manuel Orozco, por su parte, reconoce que no han sido consciente de lo que han visto y vivido en Valencia hasta que no han regresado a Sevilla. «Allí estás en una burbuja. Allí estás, literalmente, metido en el fango y sin parar de trabajar de ocho a ocho y, sin embargo, cuando terminas parece que sólo ha pasado una hora. Ya en Sevilla, nos dimos cuenta de que somos unos privilegiados. Hemos tenido mucha suerte porque ésta ha sido la mayor catástrofe que ha sufrido España».

Orozco también destaca la importancia del trabajo en equipo y del compañerismo. Reconoce que no conocía a ninguno de sus compañeros hasta que salieron hacia Utiel, pero que rápidamente conectaron. «En una misión humanitaria, los compañeros son tu familia, lo más importante». Los compañeros son la piedra en la que apoyarse y recargar fuerzas para seguir ayudando a los demás.

Voluntarios de SAMU en Valencia tras el paso de la DANA

La gestión del caos

Por Carlos Álvarez Leiva, presidente fundador de SAMU

20La gestión de una crisis requiere anticipación y un enfoque integral basado en el conocido como triángulo mágico: capacidad organizativa, asistencial y logística. La clave para absorber el caos radica en un despliegue coordinado de recursos, una prestación de socorro eficaz y una estructura de mando sólida. Una logística adaptada y una cadena de mando clara son esenciales para restablecer el orden y responder de manera efectiva a las necesidades urgentes de la crisis.

El caos es una alteración súbita, temporal y explosiva de la armonía de los sistemas que afecta gravemente a la vida, las estructuras y el medio ambiente. Tiene una duración limitada que depende de la resiliencia del sistema afectado. El caos es opuesto al orden, al control y al equilibrio, y genera pánico, angustia, inseguridad, degradación y, en situaciones extremas, muerte y desolación.

Gestionar el caos implica reconducir la situación mediante una serie de esfuerzos organizativos concretos, medibles y realizables, con una secuencia precisa y probada que incluye: búsqueda, salvamento, rescate, socorro médico, seguridad, abrigo y atención psicosocial.

El tempo caótico

En toda catástrofe, ya sea pequeña o de gran escala, se presenta un tempo caótico súbito en el cual la capacidad de reacción se ve anulada temporalmente. Este estado de shock es pasajero y su duración es inversamente proporcional al grado de planificación previa. Se caracteriza por disfunciones graves en la autoridad, confusión, inseguridad, incertidumbre, órdenes contradictorias y una desproporción dramática entre las necesidades y los recursos disponibles.

La persistencia del tempo caótico está influenciada por diversos factores, entre los que destacan: el nivel de cultura en gestión de crisis, el grado de daño en las infraestructuras de comunicación y la politización de la gestión de recursos.

La respuesta y sus fases

La anticipación es el principio logístico fundamental. Analizar la situación mientras se espera la recopilación de todos los datos solo conducirá a prolongar el caos y aumentar el sufrimiento de las víctimas. La respuesta a las catástrofes nunca es completamente suficiente ni perfectamente coordinada, debido a la diversidad de tiempos y capacidades de respuesta, que varían según el tipo de catástrofe, su extensión y la vulnerabilidad de la zona afectada.

Inmediatamente después de la primera intervención de proximidad ocurre el tsunami humanitario: la llegada espontánea y desorganizada de ayudas no solicitadas que, aunque bien intencionadas, aumentan la desorganización y retrasan la rehabilitación.

Conforme los medios de comunicación reducen la cobertura de la noticia, los apoyos foráneos tienden a desaparecer, incrementando la soledad de los afectados. En este punto, comienzan a aparecer los esfuerzos gubernamentales, generalmente de forma más organizada, pero a menudo tardíos.

Principios para la gestión del caos

Para gestionar el caos de manera efectiva en situaciones de crisis es fundamental anticiparse y realizar una evaluación detallada. El principio de respuesta previa a la demanda es el único criterio de éxito para asegurar una gestión eficiente. La acción debe dejar a un lado la influencia política y dar prioridad a un enfoque técnico, asegurando que las decisiones y acciones estén basadas en criterios profesionales y operativos.

La gestión debe enfocarse en establecer un mando único que aglutine y coordine todas las capacidades disponibles. Este liderazgo es esencial para fijar metas claras, sencillas y alcanzables, diferenciando lo fundamental de lo importante para priorizar los esfuerzos de manera efectiva. La intervención debe seguir una secuencia estratificada de operaciones que incluya búsqueda, rescate, salvamento, seguridad, socorro y refugio, permitiendo una respuesta organizada y escalonada.

Es vital fortalecer la autonomía de los intervinientes bajo una dirección única para garantizar que las acciones en terreno sean ágiles y eficaces. Las decisiones deben tomarse rápidamente y sin temor a equivocarse, ya que la prontitud es clave para reducir el impacto del caos. Además, establecer un canal de comunicación eficaz entre los intervinientes lo más pronto posible permite coordinar las operaciones de manera eficiente y evita malentendidos.

La organización de espacios para la recepción ordenada de la ayuda es fundamental, facilitando el flujo de recursos y reduciendo la confusión. Por último, la capacidad de adaptarse a los cambios y ajustar las estrategias conforme se desarrolla la emergencia es indispensable. La formación de equipos y su distribución por sectores optimiza la gestión y garantiza que cada área de la crisis esté debidamente atendida. La concentración, clasificación y evacuación de los heridos son procesos claves que deben ser ejecutados con rapidez y precisión.

Factor humano

El profesional que desempeñe la gestión del caos debe poseer una sólida formación en gestión de crisis, además de características y habilidades que le permitan responder de manera efectiva en situaciones de alta presión y complejidad. La resiliencia es fundamental, ya que asegura la capacidad de recuperarse rápidamente de las adversidades y mantiene la estabilidad emocional y operativa. Asimismo, es vital contar con una mentalidad flexible que permita adaptarse a circunstancias cambiantes y ajustar las estrategias conforme evolucionan.

La capacidad de establecer metas inmediatas es otro componente esencial. En un entorno de crisis, priorizar objetivos claros y alcanzables es clave para avanzar de manera efectiva. La claridad de pensamiento es indispensable para tomar decisiones rápidas y acertadas, mientras que una estructura mental jerarquizada facilita el procesamiento de información y la identificación de prioridades.

La eficiencia en el uso de los recursos disponibles es crucial, ya que las limitaciones en suministros y tiempo son comunes en estas circunstancias. Finalmente, la habilidad para liderar en momentos críticos no solo motiva y organiza al equipo, sino que también proporciona dirección y confianza, elementos esenciales para gestionar el caos con éxito.

Proyecto 'Languages of Welcome'

Una guía de herramientas para ayudar a personas migrantes

Sevilla acogió entre los días 7 y 11 de noviembre la tercera etapa del proyecto Languages of Welcome, dentro del programa europeo Erasmus+, una iniciativa de intercambio de buenas prácticas entre países de la frontera sur y el Mediterráneo norte. Este evento trasnacional contó con diversas actividades, entre las cuales destacó la presentación de la Guía Internacional de Buenas Prácticas LOW, que incluye varias metodologías innovadoras para la intervención con personas migrantes en frontera norte y sur. La presentación se realizó en Escuela SAMU el 8 de noviembre.

Fundación SAMU, a través de su área de Infancia y Familia, participa desde el año pasado en el programa Erasmus+ K2 Languages of Welcome, que se desarrolla en el marco de las iniciativas de la Comisión Europea para el intercambio de buenas prácticas entre distintos países miembros y países vecinos. Es un curso formativo sobre migración e inclusión a partir de buenas prácticas y para el cual se cuenta con la colaboración de Fundacione Emmanuel, con sede en Lecce (Italia). Esta iniciativa tiene financiación de la Unión Europea a través de su programa de movilidad Erasmus Plus (+).

Las actividades de Erasmus+ se basan en intercambios formativos de prácticas ejemplares en el marco de la Unión Europea. Este tipo de actividades ponen en contacto a entidades no gubernamentales y los jóvenes vinculados a estas entidades de distintos países, bien porque son usuarios de los servicios que ofrecen o bien porque forman parte de su personal laboral. En el caso concreto de la iniciativa K2 no se trata solo de población joven, sino que, por el contrario, está dirigido a activos con más experiencia de las distintas entidades.

El objetivo principal de este tipo de iniciativas es establecer redes de comunicación y colaboración en iniciativas globales que potencien la implantación internacional de la entidad, la mejora de las competencias sociolaborales de sus equipos y, por supuesto, los estándares de calidad de las organizaciones participantes.

Italia es el socio principal del programa a través de la Fundación Enmmanuel y España el segundo socio a través de Fundación SAMU. En este proyecto internacional también participan otras entidades de Portugal, Grecia, Albania y Túnez, como Glocal Music (Portugal), ROES Coperativa (Grecia), BVV (Portugal), Network for Children Right (Grecia) o Fractals Educación Artística (España).

Este proyecto se divide en tres partes que se desarrollarán a lo largo de dos años, 2023-2025 con actividades de diferente índole, como la que tuvo lugar este mes de noviembre en Sevilla.

En este caso concreto, los participantes visitaron diferentes dispositivos de Fundación SAMU, así como las instalaciones de Escuela SAMU, en Gelves, de la mano de su director, Thomas Coyoutopoulo, y los centros de menores DISL Nervión y el RB El Olivar, especializado en la atención de niños con discapacidad. También se llevó a cabo una evaluación del programa por parte de todos los operadores en el Hogar Virgen de los Reyes y una visita a los principales enclaves de la ciudad de Sevilla. «Para Fundación SAMU era muy importante ser un buen anfitrión y que los asistentes del resto de países se sintieran como en casa», explica Laura G. Rebolo, coordina el proyecto Erasmus+ K2 Languages of Welcome.

En este evento trasnacional participó un equipo de 14 personas procedentes de los diferentes operadores de los socios europeos y españoles: Italia, Portugal y Grecia, además de Fundación SAMU como principal socio español y la entidad valenciana Fractals Educación Artística. No obstante, a la presentación de la Guía Internacional de Buenas Prácticas LOW, que se realizó en Escuela SAMU, acudieron cerca de 40 personas, entre las que se encontraba tanto miembros de Fundación SAMU como de otras entidades que trabajan con población migrante en Andalucía, como Hijas de la Caridad, Fundación Don Bosco, Acercando Realidades o DOC2001.

La jornada de presentación estuvo dividida en tres partes. La primera parte estuvo centrada en la presentación de las diferentes entidades trasnacionales que participan en el proyecto.

Un paquete de buenas prácticas

Luego, fue el turno de la presentación de la Guía Internacional de Buenas Prácticas y el paquete de herramientas que se ha elaborado a lo largo de todo el proceso. Esta presentación corrió a cargo de Luana Duma, la coordinadora del programa desde Italia, con el apoyo de Raquele Bianchi, de Fundacione Enmanuele.

«Este proyecto se enmarca dentro de la prioridad horizontal del programa Inclusión y Diversidad y con él se pretende contribuir a la promoción de una Europa inclusiva. El proyecto quiere contribuir a la formación de valores comunes, compromiso cívico y participación, ya que incluye metodologías creativas y participativas que permiten la implicación de las comunidades locales de los países socios en los procesos de inclusión de las personas migrantes, la construcción de valores compartidos y prácticas de acogida innovadoras que permitan la promoción de la ciudadanía activa y los procesos de convivencia pacífica», explica Laura García Rebolo.

«Aunque fue una iniciativa un poco complicada para muchos asistentes ya que la presentación de la guía se realizaba en inglés, el sentir general fue de admiración hacia el proceso y ganas de poder acceder al material definitivo. Recibimos muchas felicitaciones de otras entidades. Estas nos dijeron que les parecía un proyecto muy interesante. Desde las áreas de Acción Social e Infancia y Familia de Fundación SAMU, dentro de las cuales se enmarca este proyecto, hemos recibido una valoración muy positiva y el impulso para continuar con iniciativas de esta índole», continua Rebolo.

Uno de los objetivos de estos eventos trasnacionales es la creación y el fortalecimiento de redes entre diferentes organizaciones y países que puedan colaborar en la construcción de una Europa más fuerte y mejor.

Escuela SAMU

Escuela SAMU: aprender a sobrevivir para salvar vidas

Escuela SAMU ha arrancado noviembre con una experiencia única de inmersión en técnicas de supervivencia: la primera acampada de supervivencia de este curso académico, un evento que se ha convertido en un pilar fundamental para el desarrollo integral de los alumnos.

La actividad se celebró entre el 5 y el 8 de noviembre en un entorno rural, donde los estudiantes del Máster de Enfermería en Urgencias, Emergencias, Catástrofes y Acción Humanitaria (UECAH) y los alumnos de los ciclos de Formación Profesional de Técnico en Emergencias Sanitarias (TES), Técnico en Emergencias y Protección Civil (TEPC), Técnico Superior de Coordinación en Emergencias y Protección Civil (TSCEPC) y Técnico en Cuidados Auxiliares de Enfermería (TCAE) fueron sometidos a un riguroso programa diseñado para probar y perfeccionar sus habilidades en condiciones adversas.

La acampada responde a la necesidad de preparar a los futuros profesionales para situaciones reales de emergencia y catástrofe en las que escasean tanto los recursos como la certeza sobre lo que puede ocurrir. Los participantes se ven obligados a improvisar, gestionar recursos mínimos y actuar con rapidez y precisión en un entorno natural. Esta experiencia formativa va mucho más allá de la teoría, permitiéndoles poner en práctica no solo conocimientos técnicos, sino también capacidades emocionales y de liderazgo en un ambiente controlado.

«La mayoría de las veces, como profesionales sanitarios, nuestros alumnos deben trabajar en condiciones en las que la rapidez y el dominio de sí mismos son claves», explica uno de los instructores de Escuela SAMU. «Esta acampada los empuja a descubrir sus límites, mientras les enseñamos a afrontarlos de forma organizada, empática y resiliente».

La actividad comenzó con un briefing en las instalaciones de Escuela SAMU, en Gelves (Sevilla), donde los estudiantes, organizados en tres equipos (Alfa, Bravo y Charlie), recibieron instrucciones y verificaron el material de supervivencia. El programa, dividido en jornadas de actividades y talleres, ha sido diseñado para cubrir todos los aspectos necesarios de una intervención en emergencias, desde la organización del campamento hasta la movilización de heridos y la gestión de contingencias.

El enfoque de cada jornada variaba, comenzando con tareas de zonificación del campamento y pasando por entrenamientos específicos en técnicas de rescate, defensa personal y atención en incidentes con múltiples víctimas. Cada equipo, liderado por instructores con experiencia en emergencias y catástrofes, tuvo la oportunidad de enfrentarse a distintos escenarios de entrenamiento y trabajar en turnos de vigilancia nocturna, una actividad diseñada para simular el compromiso y la disciplina que exige el trabajo en misiones de rescate prolongadas.

Uno de los aspectos más destacados de la acampada fueron los talleres. Cada uno de ellos estaban diseñados para cubrir diferentes habilidades críticas en entornos de supervivencia. Los participantes rotaron en los siguientes talleres: transmisiones para respuesta de emergencia; refugio de circunstancias, en el que los estudiantes aprendieron a construir refugios improvisados utilizando elementos naturales y herramientas básicas; perfeccionamiento en obtención de fuego; potabilización de agua; primeros auxilios en la naturaleza; valoración primaria en terreno hostil, que enseña a los estudiantes a identificar y tratar rápidamente amenazas a la vida en un ambiente hostil; contención verbal y manejo de pacientes agitados; defensa personal; rescate con vehículos; y sectorización en incidentes con múltiples víctimas, donde se abordaron conceptos de sectorización en emergencias, enseñando a los estudiantes a establecer zonas de seguridad y a coordinar la comunicación entre el equipo y el Centro de Coordinación de Urgencias.

La acampada no solo fue un reto para los conocimientos técnicos de los estudiantes, sino también una prueba de sus capacidades físicas y psicológicas. Para estos futuros profesionales, acostumbrados al entorno académico, esta actividad representó una ruptura con la rutina y una oportunidad de experimentar en condiciones reales lo que significa enfrentarse a una emergencia en la que la vida de las personas depende de su habilidad para tomar decisiones rápidas y efectivas.

«Cuando estás en un aula, puedes leer y escuchar historias sobre cómo responder en emergencias, pero nada es igual que estar en el terreno y tener que aplicar lo que has aprendido bajo presión,» comenta uno de los alumnos. «Esta experiencia me ha permitido descubrir mis fortalezas y también aquellas áreas en las que debo mejorar».

Además de los talleres técnicos, uno de los objetivos fundamentales de la acampada es reforzar la importancia del trabajo en equipo y la jerarquía en situaciones de emergencia. En los contextos caóticos en los que estos futuros profesionales podrían encontrarse, la habilidad para seguir órdenes, comunicarse eficazmente y trabajar en coordinación es clave. Por esta razón, la acampada incluyó diversas actividades que fomentaban estas cualidades, desde la vigilancia nocturna por turnos hasta la ejecución de simulacros en equipo. «La comunicación, el respeto a la jerarquía y el apoyo mutuo son esenciales en las emergencias. Estos estudiantes deben aprender a confiar en sus compañeros y a saber cuándo asumir el mando», apunta uno de los instructores.

El aprendizaje práctico de esta acampada de supervivencia deja una huella profunda en cada participante. En un entorno natural, los alumnos no solo aplicaron conocimientos técnicos, sino que también fueron expuestos a sus propios límites, enfrentándose a la dureza de la naturaleza y a la presión de ser responsables de su propio bienestar y el de sus compañeros.

La acampada también les brindó la oportunidad de trabajar con instructores altamente cualificados, quienes, con experiencia en emergencias sanitarias, compartieron con ellos lecciones de primera mano sobre los desafíos y recompensas de este trabajo.

Cada jornada finalizaba con un análisis de las actividades del día, en el que los instructores guiaban a los participantes en la reflexión sobre sus actuaciones, tanto de manera individual como en equipo, subrayando aciertos y proponiendo áreas de mejora.

Para los participantes de esta acampada, el regreso a Escuela SAMU no fue el fin, sino el comienzo de una reflexión profunda sobre lo aprendido y sobre cómo podrían aplicar estas habilidades en su carrera profesional. De hecho, al finalizar la experiencia, se les entregó una encuesta de satisfacción, donde compartieron sus impresiones y sugirieron mejoras para futuras ediciones. Escuela SAMU valora enormemente estas opiniones, ya que reflejan tanto los éxitos como las oportunidades de mejora de este tipo de actividades.

La acampada de supervivencia es solo el primer paso en un viaje de formación que estos estudiantes han elegido emprender. Al completar esta actividad, los alumnos no solo adquieren habilidades técnicas esenciales para su carrera, sino que también desarrollan la capacidad de adaptarse a lo inesperado y trabajar bajo presión, cualidades que los harán destacar en el campo de la medicina de emergencia y la ayuda humanitaria.

SAMU Orión

La transformación digital de SAMU avanza con el desarrollo de herramientas pioneras

En su compromiso con la transformación digital de la organización, SAMU, bajo la iniciativa SAMU Orión, sigue desarrollando iniciativas en dos líneas de trabajo: en primer lugar, la mejora de los procesos de gestión interna; y, en segundo lugar, la mejora de la eficiencia organizativa y la calidad de los servicios. En esta segunda línea, la entidad cuenta con el acompañamiento de la consultora OGA Data Driven Solutions. Juntas, ya han madurado dos proyectos innovadores y de alto impacto que generarán cambios organizativos importantes: el proyecto LLM (Large Language Models) y el proyecto de optimización de calendarios.

1. Proyecto LLM (Large Language Models)

El Proyecto LLM es una de las soluciones más avanzadas desde el punto de vista tecnológico desarrolladas hasta la fecha para SAMU. Esta herramienta de procesamiento de lenguaje natural (NLP) está diseñada para facilitar las consultas de información sobre la organización y optimizar el tiempo y la precisión en la revisión de documentos. Por situarla en un ámbito familiar para los usuarios, su utilidad es similar a la de ChatGPT, pero centrada en contenidos sobre SAMU.

Originalmente implementada en el departamento jurídico, esta tecnología ha sido recientemente extendida al área de desarrollo reflejando así su alto valor para distintas áreas organizativas.

El LLM permite a los usuarios realizar consultas en lenguaje natural sobre cualquier documento o grupo de documentos relevantes. A través de preguntas directas, el sistema proporciona información de manera precisa y rápida, integrando una amplia gama de documentos internos y externos relevantes para SAMU y sus colaboradores. De este modo, gracias a esta herramienta los departamentos pueden contrastar decisiones y optimizar sus actuaciones con base en datos detallados y accesibles.

Este sistema ofrece varios beneficios estratégicos a la organización. En primer lugar, permite a los usuarios profundizar en situaciones específicas de servicio mediante el análisis de documentos y experiencias previas. Así, el proyecto LLM posibilita que las decisiones sean más informadas y mejor fundamentadas.

Además, convierte el conocimiento acumulado en la organización en un recurso disponible y accesible aprovechando la experiencia de personas clave y eliminando la dependencia de los soportes lineales que, tradicionalmente, dificultan la explotación rápida de información.

Gracias a esta innovadora solución, SAMU agiliza y mejora significativamente el flujo de trabajo en los departamentos beneficiarios. El proyecto LLM va a ser una herramienta esencial para optimizar la eficacia operativa.

2. Proyecto Optimización de Calendarios

La gestión de horarios y cargas laborales en SAMU es compleja históricamente debido a las necesidades de organización de los recursos en diversas áreas y servicios.

El proyecto de Optimización de Calendarios, desarrollado junto al equipo de OGA, aborda estos desafíos al proporcionar una solución robusta y adaptable que integra la calendarización y la gestión de incidencias en una plataforma trazable y en tiempo real.

Este sistema automatiza y optimiza la planificación de turnos, y gestiona las incidencias de última hora para permitir una replanificación rápida y eficaz.

La herramienta estará disponible en los sistemas de gestión de SAMU consolidando la información en un entorno unificado, facilitando la gestión de tiempos y permitiendo que cada trabajador pueda visualizar y actualizar su disponibilidad y carga de trabajo de manera ágil y en tiempo real.

Esta solución proporciona múltiples beneficios que impactan de forma positiva en la organización. Permite a los responsables de cada centro o servicio acceder a la generación de cuadrantes y ajustes en tiempo real, y facilita una replanificación rápida de horarios y cargas de trabajo para adaptarse a las necesidades operativas.

El uso de parámetros matemáticos y la IA para la configuración de los cuadrantes más óptimos posibles para cada unidad de servicio, también garantiza que las consecuencias retributivas derivadas de cualquier cambio en los turnos se ajusten automáticamente, integrándose eficazmente con el sistema de gestión corporativa.

Este proceso es relevante, ya que maximiza la gestión de cuadrantes y retribuciones y asegura que la organización mantenga la flexibilidad y eficiencia necesarias para ofrecer sus servicios, incluso en situaciones no planificadas, adaptándose en tiempo real a los cambios en la demanda.

Estos proyectos, enmarcados en SAMU Orión, profundizan en la misión de SAMU de modernizar sus procesos internos y ofrecer servicios de alta calidad, fiables y adaptados a las necesidades del entorno cambiante.

Firma de SAMU y Sevilla FC

SAMU firma con el Sevilla FC

El Sevilla FC ha firmado un convenio con SAMU para garantizar la asistencia médico-sanitaria durante los partidos de fútbol y eventos que se celebren en su estadio, el Ramón Sánchez-Pizjuán, situado en la capital sevillana. Este acuerdo, que también se extiende a las instalaciones del Estadio Jesús Navas y la Ciudad Deportiva José Ramón Cisneros Palacios, refuerza el compromiso del club con la seguridad y el bienestar de sus aficionados, jugadores y personal.

El objeto principal del convenio es la prestación de servicios de asistencia a enfermos críticos, urgencias y emergencias, así como el traslado a centros hospitalarios en caso de ser necesario. Esta colaboración será efectiva en todos los encuentros de los primeros equipos masculino y femenino, así como del primer filial y escalafones inferiores, y cubrirá también entrenamientos de equipos visitantes en competiciones nacionales e internacionales.
La duración inicial del contrato es de un año, con la posibilidad de prorrogarse tácitamente. Este enfoque flexible permite al Sevilla FC adaptarse a futuras necesidades y garantizar una cobertura constante de calidad.

La experiencia de SAMU, que cuenta con más de 40 años en el ámbito de las emergencias sanitarias, es un valor añadido para esta colaboración. Su capacidad para planificar y ejecutar operativos en eventos de gran magnitud se ha demostrado en sus intervenciones previas con el Sevilla FC, así como en otros grandes eventos deportivos, como la Maratón de Sevilla. SAMU se encargará de proporcionar un equipo de profesionales altamente cualificados, compuesto por médicos y técnicos especializados en emergencias, asegurando así una atención rápida y eficaz ante cualquier eventualidad sanitaria.

Este acuerdo sigue la estela de una colaboración similar que SAMU firmó en septiembre con el Real Betis Balompié. En ese caso, el dispositivo sanitario se desplegará en el estadio Benito Villamarín, atendiendo no solo a los jugadores y personal técnico, sino también a los miles de espectadores que asisten a los partidos. En ambos casos, los dispositivos estarán compuestos por un equipo multidisciplinario, incluyendo médicos, enfermeros y técnicos de emergencias, respaldados por ambulancias medicalizadas con Soporte Vital Avanzado.

La atención abarcará desde situaciones críticas hasta la asistencia a patologías más comunes, garantizando que todas las emergencias sean atendidas de manera oportuna. Además, SAMU se compromete a ofrecer formación en Soporte Vital Avanzado al personal médico del club, fortaleciendo así las capacidades de respuesta ante emergencias.

Con este nuevo acuerdo, el Sevilla FC y SAMU no solo aseguran un entorno seguro para sus eventos, sino que también reafirman su compromiso con el bienestar de la ciudadanía y el deporte andaluz. Este esfuerzo conjunto subraya la importancia de la preparación y la atención médica en el ámbito deportivo, un aspecto fundamental en el desarrollo de cualquier evento que congregue a grandes multitudes.

ISL SAMU Dúrcal

ISL SAMU Dúrcal: un espacio creativo para sanar y conectar

Durante los últimos meses, en el centro ISL SAMU Dúrcal (Granada) se ha llevado a cabo un taller de arteterapia en colaboración con la asociación The Red Pencil Europe. El programa se divide en dos fases: la primera se centra en la formación del equipo profesional en la metodología y razón de ser de la arteterapia; y la segunda fase está dirigida a los menores residentes del recurso, con un total de 12 sesiones impartidas en el propio centro.

Este proyecto ha ofrecido una plataforma única para explorar y expresar vivencias, emociones, necesidades y preocupaciones. A través de diversas técnicas artísticas, cada sesión ha proporcionado un entorno seguro y creativo donde poder compartir historias personales y conectar con las emociones.

Esta experiencia ha permitido a los jóvenes explorar una variedad de medios artísticos, incluyendo la pintura, el dibujo y la escultura. Cada sesión ha sido diseñada para abordar diferentes temas relevantes para los adolescentes, como la identidad, la resiliencia y el duelo. Bajo la guía de Irene Rodríguez, terapeuta especializada, los participantes encontraron en el arte una forma de comunicar lo que a menudo es difícil de expresar con palabras.

Uno de los logros más destacados del taller ha sido la creación de un mural colectivo que simboliza la diversidad y la unidad del grupo. Este mural, que ahora se exhibe en el centro, no solo refleja las experiencias individuales de los adolescentes, sino también su capacidad para trabajar juntos y apoyarse mutuamente en su nueva vida.

Los participantes del taller han expresado una gran satisfacción e implicación al poder compartir sus historias y conectar con otros jóvenes que atraviesan situaciones similares. «Me siento más comprendido y menos solo», comentó uno de los participantes. Asimismo, al finalizar cada sesión se realizaron reuniones de seguimiento entre la terapeuta especializada y el área de Psicología del ISL SAMU Dúrcal, lo que ha permitido detectar nuevas necesidades y preocupaciones que deben ser abordadas.

El taller de arteterapia ha demostrado ser una herramienta valiosa no solo para la expresión personal, sino también para el fortalecimiento de la comunidad dentro del centro de acogimiento. En un contexto donde la migración forzada y la separación familiar pueden generar profundos sentimientos de pérdida y desarraigo y donde existe una clara barrera idiomática, iniciativas como este taller de arteterapia son esenciales para el bienestar emocional de los adolescentes. Este tipo de vivencias proporcionan un espacio donde los jóvenes pueden crecer y encontrar un sentido de pertenencia en su nueva realidad.

Equipo de Sevilla Integra

Sevilla Integra beneficia a más de 500 personas

El programa de empleo Sevilla Integra, subvencionado por el Ayuntamiento de Sevilla, cumple en noviembre su primer aniversario. Este programa, dedicado a la inclusión social y laboral de personas en situación de vulnerabilidad, ha demostrado ser una herramienta para mejorar la calidad de vida de sus beneficiarios y promover una sociedad más justa.

En este primer año, más de 500 personas han sido atendidas por Fundación SAMU en los distritos de Casco Antiguo, Triana y Los Remedios, donde la entidad desarrolla el programa. El objetivo principal es facilitar o mejorar la inserción sociolaboral a través de la realización de itinerarios personalizados de inserción utilizando para ello diversos métodos, instrumentos y recursos que faciliten el empleo y la mejora de la empleabilidad de las personas en situación de dificultad de inserción, logrando una mejor posición ante el mercado laboral.

En total, 535 personas han participado en una de las 35 acciones de información y sensibilización llevadas a cabo durante este año; 327 han participado en acciones de orientación sociolaboral; y 132 han realizado prácticas profesionales. En la actualidad, 350 personas tiene abierto un itinerario personalizado de inserción con Fundación SAMU a través del programa Sevilla Integra.

Sevilla Integra ha desarrollado iniciativas que abarcan desde la formación y capacitación laboral hasta el apoyo psicosocial y la mediación intercultural. Uno de los logros más notables del proyecto ha sido la implementación de competencias técnicas en diversos sectores como administración, comercio, logística y ayuda a domicilio. Estas formaciones no solo han proporcionado habilidades técnicas a los participantes, sino que también han reforzado su autoestima y confianza, elementos clave para la integración de estas personas en el mercado laboral.

Recientemente, 75 personas realizaron en Escuela SAMU un curso de 100 horas de Atención Sociosanitaria en Domicilio y el 80% de las personas que realizaron esta formación y, posteriormente, prácticas laborales lograron un empleo en la misma empresa en la que realizaron las prácticas, según explica Jesús Sarasola, coordinador de Sevilla Integra.

En total, el Ayuntamiento de Sevilla, a través del área de Cartuja, Parques Innovadores, Empleo, Economía y Comercio, aporta 4.353.082 euros de la cantidad total del programa, que asciende a 4.867.103 euros con la aportación de las diez entidades que desarrollan el programa, entre ellas Fundación SAMU, en los diferentes distritos de Sevilla.

«Desde SAMU valoramos de manera muy positiva este primer año y el feedback que recibimos por parte de los usuarios atendidos también es muy positivo. Se muestran muy contentos con los resultados, sobre todo porque nos adaptamos a sus necesidades y no les mareamos. Buscamos su inserción laboral en el menor tiempo posible», explica el coordinador de Sevilla Integra.

Sarasola reconoce que los usuarios que SAMU atiende en este programa cuentan, en su mayoría, con formación previa, competencias y valores. «Hay dos perfiles diferentes de usuarios. Por un lado, hay un grupo de personas que necesitan actualizarse y renovarse para reincorporarse al mercado laboral. Por ejemplo, en los cursos de auxiliar administrativo hay muchas mujeres que trabajaban en este sector y que necesitar adquirir nuevas competencias. Pero también trabajamos con muchas personas inmigrantes que nos derivan desde la Comisión Española de Ayuda al Refugiado y que viven en el centro de la ciudad», apunta el coordinador del proyecto. Este proyecto de empleo comenzó el 20 de noviembre y tendrá una duración de 18 meses.

Personal de SAMU First Response

SAMU First Response abre un nuevo centro para personas migrantes en Arizona

Desde el 1 de septiembre, SAMU First Response cuenta con un nuevo centro de recepción en Nogales (Arizona) con el objetivo de recibir a solicitantes de asilo que acaban de cruzar la frontera con Estados Unido. Actualmente, el centro recibe una media de 70 personas al día. Durante el primer mes, se han atendido a 1.929 personas que han llegado en 60 autobuses enviados por las autoridades migratorias de Estados Unidos. Este centro se suma a los recursos activos en Washington DC, Maryland y Springfield.

«La mayoría de las personas que recibimos son de Venezuela, Nicaragua, Cuba, Haití y países diversos de África. Según el caso y la ruta de cada uno de ellos, se trata de personas que cruzaron la selva del Darién, situada en Colombia y Panamá. Esta ruta está considerada como una de las rutas más peligrosas y estratégicas para llegar a Estados Unidos», explica Marisella Castillo, Outreach Manager de SAMU First Response.

«Dentro de los servicios que ofrecemos se encuentran transporte gratis a los refugios de la ciudad de Tucson (Arizona), que queda a una hora y veinte minutos de distancia aproximadamente de nuestro centro en Nogales; asistencia para boletos; e información sobre su próximo destino», continúa Castillo. «En nuestros centros, los migrantes también pueden comer y descansar; y acceder al wifi para comunicarse o navegar en internet, lo que resulta de una gran ayuda porque muchos necesitan comunicarse con sus familiares. Nuestro personal les ofrece teléfonos para llamadas y estaciones de carga, además de ropa limpia y artículos de higiene personal. Durante el primer mes entregamos 1.851 comidas calientes a nuestros usuarios».

Para hacer posible este trabajo lo hacemos con mucho esfuerzo. Actualmente es financiado 100% por SAMU y por eso es necesario trabajar con aliados que ayuden a la entidad a crecer y consolidar los servicios que actualmente tiene.

SAMU First Response es hoy una organización muy diferente a la que era hace dos años, pero tiene los mismos valores, pasión y dedicación para ayudar a cerca de 15.000 personas de la comunidad migrante en este tiempo. Actualmente, cuenta con un equipo de más de 90 personas que trabajan incansablemente en múltiples equipos en toda la organización para apoyar la misión.