Mohsin ya no teme a los 18
Mohsin nació en Tetuán (Marruecos), y volvió a nacer cuando tenía 16 años, en su tercer intento de cruzar el Estrecho de Gibraltar en patera, que le llevó por fin a España, aunque sin ninguna noción de español y aún menos documentación. En Tetuán dejaba a su padre, a su madre, a sus tres hermanos y a sus amigos. Toda una vida.
En un primer momento estuvo viviendo en un centro de La Línea (Cádiz). Después pasó por otro centro de Jerez, del que escapó, antes de llegar a Rivas, donde vive desde hace un año en un piso gestionado por Fundación SAMU.
Muchas son las historias que ha (hemos) vivido, y muchos también los logros que ha ido alcanzando. El 6 de abril, Mohsin cumplirá 18 años y, afortunadamente, podrá seguir su camino teniendo consigo su permiso de residencia y también su permiso de trabajo. Ambos documentos serán clave para hacer posible su integración en la sociedad como adulto y para que pueda labrarse un futuro.
Como paso previo a su mayoría de edad, Mohsin vive en la llamada “casa de autonomía” de SAMU Rivas. Trabajamos con él y con otros chicos que están en su misma situación para que poco a poco vayan tomando conciencia de lo que supone salir del sistema de protección que en su minoría de edad les ampara. También intentamos que sea consciente de la suerte y la ventaja que significan para él el hecho de que ya tenga prácticamente en orden la regularización de su documentación.
El de Mohsin es el ejemplo de que, con mucho esfuerzo, es posible alcanzar tus objetivos. En su caso: tener un futuro mejor, conseguir un trabajo y ayudar a su familia, que en su día hizo un enorme sacrificio para facilitar que su hijo llegase aquí.
Desde el principio, este joven se ha formado y ha dedicado sus esfuerzos para encontrar trabajo en el sector de la hostelería como ayudante de cocina, profesión en la que tenía cierta experiencia. Con él hemos redactado su currículum, su carta de presentación y le hemos acompañado a entrevistas, y él mismo, de manera autónoma, ha asistido a cursos en los que le han orientado y ayudado en su proceso.
Hasta ahora ha tenido varios trabajos y ha demostrado ser capaz de cumplir con las responsabilidades y obligaciones que eso conlleva. Ahora ayuda su familia y, desde hace poco, a su hermano, que también busca en España un futuro mejor.