Una nueva vida para Abdul gracias al proyecto PSH de SAMU

Una nueva vida para Abdul gracias al proyecto PSH de SAMU

Hace más de 20 años, en 2003, un joven marroquí llamado Abdul llegó a España. Entró a través de Ceuta escondido en un camión que lo llevó hasta Ceuta y de allí a Puerto Real, en la provincia de Cádiz, donde la Policía lo encontró y fue trasladado a una vivienda de acogida. Hoy, Abdul tiene 41 años y es uno de los beneficiarios del programa de Fundación SAMU dirigido a personas sin hogar. Gracias a este proyecto, que funciona en cuatro provincias andaluzas desde el pasado año, Abdul puede disfrutar de un hogar y ha logrado un trabajo indefinido en un restaurante como camarero.

El programa PSH de SAMU es un servicio de inserción social y laboral a través de pisos de baja supervisión destinados a personas sin recursos económicos que tengan capacidad para acceder a un puesto de trabajo que le permita vivir de manera independiente. Este proyecto, que sacó a licitación pública hace un año la Junta de Andalucía, cuenta con financiación del Fondo Social Europeo.

El objetivo de esta iniciativa es acompañar a estas personas, la gran mayoría extranjeros de entre 19 y 55 años, en su itinerario de inserción sociolaboral mediante el apoyo en la formación, la realización de prácticas formativas y acuerdos de colaboración con empresas. “El fin principal es que estas personas se enganchen al mercado laboral y que puedan ahorrar mientras permanecen en el servicio con el fin de que, en un periodo de ocho a doce meses, puedan establecerse de manera independiente en una vivienda ajena al servicio”, explica Alba Garrido, coordinadora de este proyecto, que SAMU desarrolla en Cádiz, Sevilla, Córdoba y, más recientemente, Huelva.

En concreto, el proyecto cuenta con más de cuarenta pisos en total en los que cada uno viven tres personas.

“Mis primeros años en España los pasé en Sevilla, Puerto Real y Málaga, donde trabajé de pescador y en un lavadero de coches, pero no tenía papeles. Luego decidí ir a Galicia, donde estuve viviendo nueve años y pude regular mi situación. Y, finalmente, me trasladé al Campo de Gibraltar. Durante este tiempo conseguir un permiso de residencia, y ahora ya tengo uno de larga duración”, explica Abdul desde uno de los pisos de Fundación SAMU en Cádiz.

Abdul señala que pudo estudiar en Marruecos, pero que su familia era muy numerosa: “Éramos trece y no había nada de trabajo”. Antes de emigrar a España, se dedicó al contrabando de comida y productos de higiene en Ceuta y, luego, decidió ir a España para poder mejorar la situación económica de su familia. “Decidí emigrar a España y no a otro país porque estaba cerca, mi familia es del norte de Marruecos, además es un país donde existe una mezcla muy bonita y entrar en el país era posible. Por otro lado, España era un país seguro, y si tenía que dormir en la calle, no temía que me fuera a pasar algo”.

La situación de Abdul en España era relativamente buena. Tenía trabajo y sus papeles en regla, así que en 2020 decidió ir a Marruecos a visitar a su familia. Fue entonces cuando se desató la pandemia del coronavirus, España cerró su frontera con Marruecos y Abdul no pudo regresar. “Tuve que pasar toda la pandemia en mi país y, cuando pude regresar a España, no tenía trabajo y la cosa estaba muy difícil para conseguir un nuevo contrato en ese contexto. Fui a una trabajadora social, que me derivó a un albergue en Algeciras. Allí sólo estuve un día y, luego, me mandaron a otro albergue de La Línea durante seis días, a una residencia y a un piso de semiautonomía en Algeciras, donde estuve tres o cuatro meses. Luego, conocí a Fundación SAMU y su programa habitacional para personas sin recursos”.

Abdul entró en el programa PSH de SAMU en Cádiz en febrero de 2023. Ahora convive con un compañero, aunque hasta hace poco tiempo eran tres en el piso.

“En SAMU me han ayudado a tener una vivienda donde poder vivir. Para mí es un gran apoyo, es mi familia. Los profesionales de SAMU se preocupan por mí, me han ayudado a encontrar un trabajo y me apoyan en mi día a día. Puedo conversar con las técnicas del programa y desahogarme con ellas cuando algo me sobrepasa. Durante este año, he aprendido a tener paciencia y educación, sobre todo a respetar y a ayudar a mis compañeros y a luchar por mi futuro. Me han ayudado a forjarme una buena personalidad y a fijar mis objetivos”, explica Abdul. “Lo que más me gusta del programa es que me siento como en casa, siempre me apoyan y me escuchan. Me han dado mucha ayuda y estabilidad”.

Abdel estuvo repartiendo su currículum en varias empresas y establecimientos hosteleros hasta que el pasado verano le llamaron los dueños del Chiringuito Caramba, le hicieron una entrevista y le contrataron para la cocina del chiringuito, primero, y, luego, como espetero. “Primero estuve con otra persona, que me enseñó lo que debía hacer, y luego ya estuve solo. Al terminar la temporada, pasé a ser camarero en el Restaurante La Taberna, de los mismos jefes”.

Ahora, los objetivos de Abdel son seguir trabajando y encontrar una vivienda que reúna las condiciones para poder traer a España a su familia, pues está casado y tiene una hija de cuatro años. “Mis objetivos son encontrar una vivienda que reúna las condiciones para poder traer a mi familia de Marruecos y seguir trabajando para vivir una vida digna y feliz”.

Tres años de investigación científica en SAMU

Tres años de investigación científica en SAMU

El Instituto SAMU de Investigación Científica (ISIC) cumple este mes de febrero su tercer año de vida. Fundación SAMU puso en marcha este órgano que aglutina todos los proyectos de investigación en materia de salud, servicios sociales y nuevas tecnologías de SAMU en febrero de 2021. Se activó con el propósito de recopilar, producir y transferir las iniciativas, proyectos e investigaciones que se realizan en las diferentes áreas funcionales de SAMU, además de Escuela SAMU y la clínica de salud mental SAMU Wellness. Este proyecto se ha visto fortalecido gracias a los convenios de investigación firmados con diversas instituciones académica, entre ellas la Universidad de Sevilla, la Universidad Loyola o la Universidad Pablo de Olavide.

“SAMU ha demostrado una excelente motivación investigadora desde sus inicios en 1981 con el Grupo de Investigación Operativa del área de Emergencias. Asimismo, destaca su amplia producción científica a lo largo de sus 35 años de postgrado universitario con una producción de más de 1.300 trabajos académicos”, explica Maribel Álvarez Leiva, directora del área Hospitalaria de SAMU.

“SAMU tiene como objetivo convertirse en Agente del Conocimiento en Andalucía y en figuras análogas en otras comunidades autónomas. Esto exige demostrar una clara actividad investigadora a través de un órgano propio que aglutinar y transfiera la producción científica generada en sus diferentes áreas funcionales”, continúa Álvarez Leiva.

Los objetivos del ISIC son impulsar proyectos de investigación en los campos de la salud, bienestar social y educación; aglutinar y coordinar la actividad investigadora y de divulgación científica ya existente en SAMU; publicar libros científicos y facilitar la publicación de artículos de SAMU en revistas indexadas; participar en grupos de trabajo relacionados con la investigación y el desarrollo; y favorecer que el profesorado de SAMU pueda tener actividad investigadora con respaldo universitario, entre otros.

Dentro del ISIC, hace ahora dos años, en enero de 2022, nació la Academia SAMU como espacio y agente de educación superior para la plantilla de SAMU. Su objetivo es contribuir a la capacitación de los jóvenes talentos y directivos de la organización para que desempeñen un liderazgo que les permita abordar los retos actuales, como la humanización, la sostenibilidad, la innovación y la digitalización.

El programa de la academia comprende acciones formativas de diferentes niveles y temáticas en formato de cursos, seminarios, talleres y/o eventos académico-científicos. Entre las acciones formativas llevadas a cabo en 2023 destacan el curso de Alta Representación Institucional, en el que participaron 23 directivos y gerentes de todas las áreas de SAMU; y el curso de Excelencia en la Gestión de Servicios y Centros Sociales y Sociosanitarios, en el que ya han participado 87 directivos en sus tres ediciones.

También se ha llevado a cabo una formación intensiva dirigida a directivos noveles o cargos intermedios para identificar y fomentar el talento. Fueron unas jornadas de convivencia en el alojamiento municipal Casa Pingo en Berrocal (Huelva), en las que se pretendía detectar el talento dentro de los directivos noveles e inculcar los valores institucionales. En este curso participaron 14 profesionales de SAMU.

Hay que sumar las I Jornadas Internacionales sobre Experiencias e Iniciativas en Innovación Social, en las que participaron 372 personas de manera telemática, y la reunión plenaria anual de jefes y directores que congregó a 104 personas.

Con respecto a la formación externa, destacan el Curso de Voluntariado en Emergencias Sociales a través de la Cátedra de Innovación Social SAMU y la Universidad Pablo de Olavide; y el curso de Autocuidado y Hábitos de Vida Saludable organizado por la Universidad Nacional de Educación a Distancia (UNED).

Este año, la Academia SAMU también ha impulsado el desarrollo de cinco proyectos: el programa Lazos, que tiene como finalidad aumentar las redes de apoyo en personas con trastornos mentales a través de actividades lúdicas y culturales; un proyecto de investigación acerca de las personas sin hogar; un mapeo del perfil de salud mental y bienestar emocional del alumnado universitario; el proyecto Soledad No Deseada, que nace de la unión de la Fundación Curar y Cuidar y la Fundación SAMU con el objeto de trabajar en el estudio de la soledad no deseada entre las personas mayores; y otro que evalúa la eficacia en el manejo de la silla de ruedas desde la perspectiva del cuidador y la carga mental que genera.

Academia SAMU, además, cuenta con un programa de doctorado, Mentoring Doctorando, que tiene como objetivo principal incrementar el número de profesionales de SAMU con tesis doctorales. En 2023, 18 profesionales de SAMU de diferentes áreas participaron en este programa.

Cátedra de Innovación Social

Otro de los grandes proyectos impulsados por el ISIC ha sido la creación de la Cátedra de Innovación Social junto con la Universidad Pablo de Olavide de Sevilla. Su objetivo es establecer un marco de colaboración para el desarrollo del conocimiento en el área sociosanitaria a través de la innovación social. Esta cátedra permite llevar a cabo actividades de formación, tanto reglada como no reglada, y promover la cooperación educativa entre ambas entidades para la mejora de la empleabilidad de los estudiantes. Está prevista la concesión de becas, ayudas y premios.

En investigación, se impulsa el desarrollo de nuevas líneas de trabajo relacionadas con la innovación social del tercer sector y la elaboración de informes y estudios en los ámbitos de la salud y la acción social. Uno de los proyectos desarrollados es un mapeo del perfil de la salud mental y el bienestar emocional de los universitarios.

Entre las actividades celebradas en 2023 destacan las I Jornadas Internacionales sobre Experiencias e Iniciativas en Innovación Social (23, 24 y 25 de febrero de 2023) dirigidas a profesionales del ámbito sociosanitario. Participaron 174 personas. Se presentaron 19 comunicaciones en formato póster y 33 comunicaciones orales, 21 ponencias y 2 conferencias magistrales.

También se celebró el curso de Voluntariado Universitario en Emergencias Sociales del 31 de enero al 14 de febrero.

Alliance 4

El ISIC también lidera la iniciativa internacional Alliance for Migration Research (Alliance 4), que goza de acuerdos con universidades de Europa, Estados Unidos y América Latina. Está financiada por Fundación SAMU y su filial en Estados Unidos, SAMU First Response, y su objetivo es facilitar un ambiente académico internacional para impulsar las investigaciones relacionadas con las migraciones alrededor del mundo y su impacto en las naciones anfitrionas. universidades, administraciones públicas, empresas y organizaciones benéficas pueden unirse a esta alianza para la investigación sobre migraciones de forma gratuita. Profesores, médicos y estudiantes de doctorado también podrán postularse de manera individual.

Entre las líneas iniciales de investigación destacan el impacto económico de la migración, la salud mental y emocional de los inmigrantes, la perspectiva de género, menores inmigrantes, mejores prácticas de los servicios sociales, racismo o la migración como factor de reducción de la pobreza y desarrollo, entre otros.

Ya han confirmado su presencia en la alianza American University, a través de su Centro de Estudios Latinoamericanos y Latinos (Washington DC, EE.UU); ISIC (Sevilla, España); CISDE-Campus Internacional para la Seguridad y la Defensa (Sevilla, España); y la Universidad Pablo de Olavide, a través de la Cátedra de Innovación Social (Sevilla, España). Y hay una treintena de entidades e instituciones de todo el mundo invitadas a la reunión de lanzamiento prevista para el 16 y 17 de octubre de 2024 en Sevilla.

Jóvenes beneficiarios de los programas de Fundación SAMU

Fundación SAMU atiende a más de dos mil jóvenes en 2023

El área de Infancia y Familia de SAMU ha desarrollado en 2023 numerosos proyectos que han tenido grandes resultados. Pero si hay un hecho que ha marcado de manera especial el pasado año éste ha sido la crisis migratoria sin precedentes vivida en las Islas Canarias en el último trimestre de 2023. El área de Infancia y Familia de Fundación SAMU, de manera inmediata, puso en marcha su maquinaria para apoyar al gobierno autonómico y acoger a los centenares de niños que llegaban al archipiélago sin la compañía de un adulto

Canarias revivió en 2023 la crisis de los cayucos de 2006 y superó la cifra de 31.678 personas que llegaron a bordo de pateras o cayucos aquel año. Sólo en el mes de octubre, más de 4.200 niños y adolescentes no acompañados arribaron al archipiélago.

Fundación SAMU ha sido una entidad clave en la campaña de acogida inmediata de menores. Un total de 660 jóvenes han sido atendidos por SAMU en alguno de sus 12 dispositivos de Canarias del 1 de enero al 30 de octubre de 2023.

El primer contacto que SAMU tuvo con menores migrantes no acompañados fue en 2007. Aquel año, la organización respondió de manera inmediata a la llamada de emergencia de la Junta de Andalucía ante la llegada masiva de migrantes a las costas de la región, muchos de ellos menores de edad. Dieciséis años después, Fundación SAMU es uno de los principales operadores globales en la atención a menores en acogimiento residencial y acogidas de emergencia. Los objetivos del área de Infancia y Familia han ido creciendo para dar respuesta a cada una de las necesidades de los menores migrantes y los extutelados con nuevos programas de mayoría de edad y siempre con la mirada puesta en una misma línea de actuación: lograr la plena inclusión, autonomía y emancipación de estos jóvenes en la sociedad.

SAMU cerró 2023 con 46 recursos de diferentes tipologías (dos menos que en 2022) en 14 provincias españolas dirigidos a menores de edad. A esto hay que sumar un programa de acompañamiento, apoyo auxiliar y mediación intercultural en residencias públicas de protección de menores de la Comunidad de Madrid y un proyecto de intervención socioeducativa con menores en riesgo de exclusión a través de la educación de calle financiado por el Ayuntamiento de Huesca.

Además, SAMU gestiona 19 recursos diferentes de mayoría de edad para jóvenes extutelados en siete de las ocho provincias andaluzas. Con respecto al ejercicio anterior, ha desaparecido el dispositivo existente en Huelva.

De las numerosas iniciativas desarrolladas por SAMU dentro de este área destaca el programa Barrio concienciado: juventud migrante en El Cerezo, desarrollado en el distrito sevillano Macarena con el apoyo del Ayuntamiento de Sevilla y el área de Cooperación Internacional y Acción Humanitaria de Fundación SAMU. Este proyecto, ya finalizado, tuvo como objetivo principal concienciar a la ciudadanía sevillana en general, y, en particular, a los vecinos de la barriada de El Cerezo, sobre la realidad de los jóvenes migrantes que, además, son extutelados.

El proyecto concluyó con la exposición Historias de vida: 10 historias reales de superación, en la que son los propios jóvenes los que hablan de su proyecto migratorio.

La acción del área de Infancia de Familia de SAMU se divide en siete zonas: Andalucía Centro, Andalucía Oriental, Andalucía Occidental, Madrid y Aragón, Ceuta, Islas Baleares y Canarias. En total, en 2023 fueron atendidos 2.030 menores de edad, a los que hay que sumar 146 jóvenes que se beneficiaron de los programas de mayoría de edad que Fundación SAMU desarrolla en Andalucía.

El mercado solidario de Sa Jovería

El mercado solidario de Sa Jovería

Después de ocho meses de funcionamiento, el equipo de Fundación SAMU del Centro Provisional de Baja Exigencia Sa Jovería sigue reflexionando sobre cómo puede acompañar con las mejores condiciones posibles a las personas a las que se atiende cada día en este recurso con el objetivo de superar las barreras que la sociedad les plantea.

Cuando una persona no se encuentra ni a sí misma es muy difícil ponerla en una situación condicionante pidiéndole requisitos para su evolución. Si una persona no se ve a sí misma, no se valora ni se ama, mucho menos podrá reconocer cuánto bien le hará todo lo que los profesionales de un centro como éste le piden que haga para su mejoría. Nos referimos a los ámbitos social, laboral, formativo y sanitario-terapéutico.

Teniendo en cuenta que el trabajo en red favorece el establecimiento de un acompañamiento global e integral de las personas, desde el CBE Sa Jovería nos decidimos a crear un espacio de cohesión grupal en el que poder fomentar la integración de este colectivo. Así se planteó un proyecto dirigido a la formación de competencias básicas para poder relacionarse con el mercado laboral existente. Evaluando los perfiles derivados desde los diferentes servicios sociales de la Isla, Fundación SAMU decide establecer colaboraciones con diferentes personas expertas en temáticas de relación social y empoderamiento personal.

El proyecto residencial incluye un bloque donde reinsertar a las personas usuarias del servicio: el proyecto Mercat Solidari, un programa de actividades relacionadas con la recuperación de los hábitos saludables en los que las personas deben sentirse aptas para dicho desarrollo y, por tanto, deben empezar proponiendo y estableciendo ellos mismos unos objetivos alcanzables.

Este proyecto piloto aspira a recuperar la integridad física de los participantes, permitirles adquirir hábitos saludables e impulsar su integración social a través del desarrollo de habilidades sociales y la participación en actividades comunitarias, educativas o laborales.

Para llevarlo a cabo, lo primero que se hizo fue proponer a las personas usuarias del servicio dejarse acompañar por profesionales en terapias holísticas. En este caso, fueron terapias encaradas al cuerpo, con prácticas del TCI (Terapia Corporal Integrativa). Esto les permitió identificarse y conectar con su parte más primitiva, el instinto, para darse cuenta de desconectadas que estaban de su emocionalidad. Fue posible gracias a profesionales que asistieron a nuestros recursos y nos regalaron estas prácticas corporales. Gracias a Driss y Cristina; gracias a Miriam y Adela.

Más tarde la entidad Sempreviva nos propuso una colaboración para realizar tres talleres de artesanía con plantas medicinales y aromáticas, centrada en la producción y elaboración en productos locales de Ibiza. Gracias a Laia Ribes.

A partir de entonces, pudimos aprovechar todos los recursos que habíamos generado para lanzar la propuesta al Govern Balear y al Ayuntamiento de Ibiza de llevar a cabo un mercado solidario para las fiestas de Navidad. Nos proporcionaron todas las facilidades para poder disponer de una parada de venta en las fiestas, un lugar céntrico y hermoso en el Mercat Vell d’EIvissa. Y así, Sa Jovería pudo participar en el Mercadillo Solidario celebrado del 2 al 4 de enero, aprovechando la asistencia de los pajes reales y la participación de la ciudadanía en esos actos festivos. Fue un gran salto cualitativo en nuestro proyecto de acción e intervención social.

 

ALBA LÓPEZ ALEU. Coordinación del Centro Provisional de Baja Exigencia Sa Jovería

Hiba Allah Taouali Belharirs, psicopedagoga de SAMU

Hiba Allah Taouali: “Siento el dolor del pueblo marroquí como si fuera propio”

Hiba Allah Taouali Belharirs (Benimellal, Marruecos, 1993) ha participado en dos contingentes de la misión humanitaria que SAMU puso en marcha tras el terremoto de Marrakech en septiembre. La psicopedagoga se encuentra actualmente en Marruecos.

—¿Cuándo comenzó a trabajar en Fundación SAMU?
—Comencé a trabajar en Fundación SAMU hace ahora dos años, el 22 de diciembre de 2021, en un centro de menores de Sevilla, donde continúo actualmente. Las funciones que desarrollo incluyen la mediación intercultural, así como la orientación laboral. Esta última responsabilidad me fue ofrecida hace unos meses, decisión que tomé con gusto y acepté con entusiasmo.

—¿Qué destacaría del día a día de su trabajo?
—Mi labor principal radica en facilitar la comunicación entre el equipo y los menores en el centro, superando las barreras lingüísticas y resolviendo disputas que puedan surgir en la convivencia diaria, tanto entre los menores como entre ellos y los profesionales. También realizo un papel importante en la orientación laboral de nuestros menores sobre opciones de desarrollo profesional y estrategias para alcanzar metas laborales, ya que ellos llegan a Europa con un objetivo personal muy marcado: encontrar trabajo para ayudar a su familia.

—Tras el terremoto de Marrakech en septiembre de 2023, participó en uno de los contingentes de la misión humanitaria que Fundación SAMU puso en marcha horas después de la catástrofe. Además, en diciembre, participó en una caravana solidaria que también tenía como objetivo las familias afectadas por el terremoto ¿Cómo ha sido esta experiencia?
—Ciertamente, tuve la oportunidad de formar parte del segundo contingente de la misión de SAMU en Marruecos, donde colaboré con un equipo multidisciplinario compuesto por técnicos, enfermeros y médicos. Mi función como psicóloga en dicha misión consistió en proporcionar apoyo emocional a las víctimas del terremoto. Asimismo, durante el mes de octubre, participé en un programa de empoderamiento psicosocial para mujeres afectadas por el terremoto, en el que trabajé en colaboración con Project Hope y High Atlas Foundation. Durante el mes de diciembre, continuamos llevando a cabo iniciativas en este ámbito.

—¿Qué destacaría de ese primer viaje?
—Fue una experiencia única y muy enriquecedora Aprendí a abordar de manera efectiva las necesidades emocionales de las personas en situaciones de crisis y a trabajar de manera colaborativa en equipos multidisciplinarios. Además, fortalecí mis habilidades en la implementación de programas de empoderamiento psicosocial, contribuyendo al bienestar de las comunidades con las que he tenido el privilegio de trabajar. Esta vivencia ha ampliado mi perspectiva profesional y personal.

—¿En qué localizaciones estuvisteis?
—Han sido varias las localidades en las que hemos trabajado. En aquella segunda misión de octubre, fuimos a la zona de Taroudant, mientras que en la misión de diciembre, hemos estado trabajando por la zona de Al Houz.

—Tras participar en uno de los contingentes de la misión en octubre, ¿por qué decidió repetir de nuevo en diciembre?
—Mi motivación radica en la importancia de brindar ayuda a estas personas. Me propusieron participar en esta nueva misión y lo acepté sin pensarlo, ya que esta caravana solidaria presentaba características distintas respecto a la misión de octubre. En esta ocasión, nuestro objetivo era proporcionar apoyo con recursos destinados a mitigar los efectos del frío, consolidando así el compromiso que he adquirido con la asistencia humanitaria en contextos diversos.

—La caravana solidaria se desarrolló del 3 al 10 de diciembre, pero usted no ha regresado y continua trabajando en la zona. ¿Cuáles son ahora sus objetivos?
—Continuar fortaleciendo la autonomía de mujeres y niños a través del apoyo psicosocial que les brindamos. Su situación actual demanda no solo asistencia material, sino también apoyo psicológico, dado que se encuentran en un punto crítico que requiere una intervención integral para mejorar su bienestar general.

—¿Cuántos personas han participado en esta caravana solidaria?
—En este tercer contingente hemos contado con la contribución de Maribel Álvarez Leiva, quien, aunque no ha viajado con nosotros físicamente, ha desempeñado un papel activo en todas las fases de la planificación. Junto a ella, han estado el fundador de SAMU, Carlos Álvarez Leiva; Emilia García, gerente de SAMU; Antonio Luis Moreno, técnico en cooperación; e Icram Mohamed Chairi, directora de SAMU Tánger. Todos juntos hemos conformado un equipo cohesionado y comprometido para llevar a cabo nuestras actividades de manera efectiva.

—El terremoto de Marrakech ocurrió en septiembre, pero SAMU ha prolongado su misión tres meses más, ¿por qué?
—Debido a la persistencia de necesidades críticas que requieren una intervención continua. La decisión se basa en la evaluación de la situación actual, donde se identificaron desafíos y carencias específicas que aún demandan atención y apoyo. La prolongación de la misión refleja el compromiso de SAMU con el bienestar sostenible de la comunidad afectada, asegurando que las acciones emprendidas aborden de manera efectiva las necesidades en evolución y contribuyan a la recuperación a largo plazo.

—¿Qué papel ha jugado en esta última parte de la misión?
—Mi papel en esta misión era el de “inteligencia local”, como ha apodado el doctor Carlos Álvarez Leiva. En este sentido, mi labor ha consistido en seleccionar los pueblos que íbamos a visitar, tarea que ya había realizado en colaboración previa con el equipo de HAF y Project Hope en el programa de empoderamiento. Debía identificar a las familias con las que íbamos a trabajar a través de listados, las necesidades que tenían, así como la organización de la ruta y la distribución de los productos en el terreno. Además, he mantenido una comunicación constante con los responsables de los diversos pueblos, facilitando así una coordinación efectiva en todas las etapas del proceso.

—¿Qué necesidades habéis identificado en esta parte de la misión?
—Como mencioné anteriormente, nos hemos enfrentado a necesidades tanto psicológicas como materiales. Es importante destacar que estas comunidades residen en zonas montañosas y, actualmente, nos encontramos en plena temporada de invierno, con la proximidad de lluvias, nieve o fuertes vientos. Cabe recordar que las personas aún viven en jaimas, lo que complica aún más la situación dadas las condiciones climáticas adversas.

—¿En qué situación se encuentran las personas que atendéis?
—Lamentablemente, nos estamos enfrentando a una variedad de situaciones desgarradoras. En algunas familias, hemos presenciado pérdidas totales, donde han perdido todos sus bienes. Además, hemos encontrado casos extremadamente tristes, como niños que han quedado huérfanos y padres que han perdido a sus hijos… En resumen, nos encontramos frente a una verdadera tragedia que ha dejado un impacto devastador en la vida de muchas personas, evidenciando la urgencia y la importancia de nuestra intervención para brindar apoyo en estas circunstancias tan difíciles.

—Desde el punto de vista psicológico, ¿cuál es el estado de estas personas?
—La situación de las personas afectadas es bastante crítica. Aunque hemos estado llevando a cabo talleres de empoderamiento con ellos, como mencioné anteriormente, es importante destacar que este proceso lleva tiempo. En las cuatro sesiones que hemos tenido con ellos, hemos logrado ayudarles a mejorar algunos aspectos, como el afrontamiento al duelo, la reducción de la ansiedad o el manejo del estrés. Sin embargo, es necesario reconocer que estas mejoras son solo el inicio de un proceso más extenso, ya que la atención psicológica efectiva demanda un compromiso a largo plazo y un trabajo continuo.

—¿Cuál es la situación más difícil a la que se ha enfrentado en esta misión?
—Los momentos más difíciles a lo largo de esta misión han sido, principalmente, durante las sesiones individuales con las participantes con las que trabajo. Una de las experiencias más desafiantes para mí fue cuando una madre compartió cómo perdió a sus dos hijas (3 y 5 años) y a su marido en esa fatídica noche. Pasó horas viendo a sus seres queridos agonizar bajo los escombros, mientras ella también estaba atrapada bajo una pared y no pudo hacer nada para ayudar. Este relato impactante y doloroso destaca la extrema tragedia a la que se han enfrentado estas personas, y subraya la importancia crítica de ofrecer apoyo psicológico y emocional en situaciones tan angustiantes.

—La caravana solidaria, última fase, de momento, de la misión de SAMU en Marruecos ya concluyó, sin embargo, usted ha continuado su estancia en este país, ¿por qué?
—Para continuar con el desarrollo del proyecto de Project Hope. Mi papel se centra en la observación de talleres grupales e intervención en las sesiones individuales, especialmente dirigidas a mujeres y niños en los diversos pueblos en los que estamos trabajando. El enfoque implica trabajar durante cuatro días consecutivos en un mismo pueblo, atendiendo a un promedio de 30 mujeres durante ese período. Además, contamos con una cuidadora (Nany) que se encarga de los hijos de estas mujeres, permitiéndoles participar en las sesiones con tranquilidad. Mi función es seguir ofreciendo apoyo psicosocial y emocional en este proyecto a medida que avanzamos en el proceso de recuperación y empoderamiento de estas comunidades.

—¿Qué ha significado para usted esta experiencia a nivel personal?
—Esta misión tiene una significación profunda para mí, siento el dolor del pueblo marroquí como si fuera propio. Además, observar la gratitud en los rostros de los mayores y los niños es algo invaluable. En lo personal, este compromiso ha fortalecido mi aprecio por los pequeños detalles. La oportunidad de ofrecer ayuda en un entorno tan complejo ha reforzado mi convicción sobre la importancia de las acciones cotidianas y la capacidad de generar un impacto positivo en las vidas de los demás.

Zakaria, beneficiario del Programa JEM Córdoba de Fundación SAMU

Zakaria sueña con ser futbolista profesional

Zakaria entró en el Programa JEM Córdoba con un proyecto muy claro: el fútbol es su pasión e iba a luchar por jugar en un equipo. El joven juega a este deportes desde su niñez, compatibilizando sus estudios y trabajo en Marruecos con los entrenamientos y partidos que tuviese, llegando a jugar en segunda división en la categoría de cadete en su ciudad natal, Beni Mellal.

A su llegada a España, se apuntó en el Club Deportivo Alcázar y en el Club de Ciudad Jardín, donde se encontraba entrenando y jugando algunos partidos amistosos, pero no conseguía ser inscrito en la Real Federación Andaluza de Fútbol debido a su situación administrativa, y así poder jugar junto con sus compañeros en los partidos de liga oficiales.
En la siguiente temporada, cambió de equipo, y fue el CD Miralbaida el club que se comprometió a lograrlo al comprobar el gran potencial que Zakaria tenía por desarrollar. Con la ayuda del equipo técnico del Programa JEM Córdoba, estando en contacto con el presidente y entrenador del club, aportando la documentación necesaria, y acreditando su residencia en Córdoba, se cumplió su primera gran meta: ser federado y poder jugar en la liga deportiva. Ha disfrutado de toda una temporada como titular, combinando sus entrenamientos y partidos con su formación y compromisos en el programa de forma impecable.

Actualmente, con la llegada de la nueva temporada y en su afán de superación, ha sido fichado por el A.D fútbol base de Bujalance, logrando alcanzar una categoría mejor en 3ª Andaluza Senior, y una remuneración por partido ganado, alcanzando así otra de sus metas: dar el primer paso para profesionalizarse como jugador de fútbol.

Cabe destacar que durante el año y medio que Zakaria ha estado en el recurso, le han llovido las ofertas en diferentes clubes, y todos sus entrenadores y compañeros no han tenido para él más que elogios, muestras de cariño y apoyo, no solo por su calidad como jugador, si no como compañero y persona.

TAMARA LÓPEZ SÁNCHEZ.
Orientadora sociolaboral JEM Córdoba

Misión SAMU Marruecos 2023

Mantas y kits de higiene para 250 familias del Atlas marroquí

Fundación SAMU, en colaboración con SAMU Tánger, envió una caravana solidaria a Marruecos con el objetivo de llevar útiles de higiene y abrigo para 250 familias de aldeas del Atlas afectadas por el terremoto de Marrakech sucedido en septiembre.

La caravana, liderada por efectivos de SAMU, partió de Sevilla el 3 de diciembre y regresó a la base el 10 de diciembre. Su desarrollo fue posible gracias al patrocinio del Consulado de Marruecos en Sevilla y a dos subvenciones del Instituto Municipal de Asuntos Sociales (IMAS) del Ayuntamiento de Cáceres y la Diputación de Huesca.

La misión estableció como población destinataria de la ayuda aquella ubicada en zonas más alejadas de Marrakech, al ser las personas más desfavorecidas y que a su vez tienen mayores dificultades para recibir recursos de este tipo. Así, la caravana de vehículos visitó Tinisket, Infgane, Tinmal, Tizagharine y Taghreghist. La última de ellas está situada a unos 100 kilómetros de Marrakech y a unos 700 kilómetros de Tánger. Los paquetes que se distribuyeron en estas poblaciones incluían elementos para el frío, mantas, chubasqueros y kit de higiene (gel, barreño, toallitas y detergente).

Participaron en la misión el doctor Carlos Álvarez Leiva (dirección), Icram Mohamed Chairi (subdirección), Antonio Luis Moreno (mando), Hiba Allah Taouali Belharir (jefe de equipo en zona), Emilia García Quirós (personal de apoyo) y Maribel Álvarez Leiva (elemento retrasado).

Hiba Allah subrayó que, tras el terremoto, la población sigue teniendo necesidades tanto psicológicas como materiales: “Estas comunidades residen en zonas montañosas y, actualmente, nos encontramos en plena temporada de invierno, con la proximidad de lluvias, nieve o fuertes vientos. Son personas que aún viven en jaimas, lo que complica aún más la situación”.

Esta caravana solidaria a Marruecos sigue la estela de los contingentes de SAMU que han trabajado en el país vecino desde el terremoto que asoló el sur del país en septiembre.
Tras el seísmo, la entidad volvió a demostrar su capacidad operativa y de respuesta con la misión desplegada en las zonas más afectadas por el terremoto entre el 9 y el 29 de septiembre.

Dos expediciones de voluntarios, respaldadas por Project HOPE, se relevaron sobre el terreno durante todo el mes. La primera se centró en la búsqueda de supervivientes con la unidad cinológica y en primeras intervenciones sanitarias en Adassil, a 100 kilómetros de Marrakech, y sus alrededores. La segunda, establecida en Tigouga (Taroundant), realizó tareas de asistencia sanitaria a la población de zonas de difícil acceso. Los equipos de SAMU realizaron más de 600 intervenciones y su labor, en muchos casos, sirvió para salvar vidas.

Los voluntarios de SAMU llegaron a la zona de trabajo asignada por las autoridades del país en 36 horas. Este inmediato despliegue fue posible gracias a una rápida toma de decisiones, a una gran capacidad de respuesta logística y humana, y al hecho de que SAMU cuenta con presencia en Tánger desde 2017, lo que facilitó las autorizaciones oportunas.
La primera misión estuvo formada por 19 personas: cinco médicos, dos enfermeros, ocho TES y cuatro especialistas en rescate acompañados de dos perros, con Borja González de Escalada, vicepresidente de Fundación SAMU, como mando operativo.

La primera parte de la misión se centró en las tareas de búsqueda de supervivientes a cargo de los perros Homero y Birka. Se encontraron con un hándicap: en una zona de construcciones de adobe y piedra, el terremoto arrasó con la mayor parte de los edificios. Los vecinos y familiares habían logrado sacar a algunas personas de sus viviendas justo después del temblor, pero después ya no fue posible localizar a ninguna persona con vida.

Junto a estas labores de búsqueda, SAMU mantuvo activo un puesto médico avanzado en Adassil y realizó cada día expediciones a aldeas de los alrededores, conforme se iban limpiando los caminos. Se visitaron más de 20 aldeas. También se llevaron a cabo tras-lados en ambulancia a hospitales de ciudades como Marrakech o Tánger. “No hemos logrado rescatar supervivientes, pero sí hemos salvado vidas, y esto le da sentido y un gran valor al esfuerzo de todos”, señaló, a su regreso, el mando operativo.

El primer contingente fue relevado de forma inmediata por una segunda expedición, bajo petición de las autoridades locales y de Project HOPE. Estuvo formada por 10 personas (dos médicos, un enfermero, cinco TES, una psicóloga y un médico), bajo el mando operativo de Andrés Rodríguez Holst.

La misión se dirigió a la aldea de Tigouga, a unos 300 kilómetros de Marrakech y cerca del epicentro del seísmo. La labor de los sanitarios de SAMU fue muy importante para dar continuidad a los cuidados inmediatos. Además, se atendió a mujeres embarazadas, niños y adultos dependientes o personas con enfermedades crónicas.
Tras este segundo contingente, SAMU puso en marcha una misión de apoyo psicológico con el envío de tres especialistas al terreno de la mano de la ONG local High Atlas Foundation.

Residencia de Mayores Taliarte Norte. Fundación SAMU

El Belén sostenible de Taliarte Norte

Desde la residencia de mayores Taliarte Norte, centro público de atención Social y sociosanitaria del cabildo de Gran Canaria, nos encanta volver a darle una nueva vida a los materiales reutilizables. Es una práctica que nos apasiona y con la que concienciamos a nuestros usuarios del buen uso de los recursos con los que contamos día a día, haciéndolo de manera racional y sostenible. La educación ambiental es un proceso de aprendizaje dirigido a toda la sociedad, independientemente de la edad de las personas. Es por ello que, en la residencia, se hace necesaria la aplicación de talleres de reciclaje y sostenibilidad en los que el objetivo es lograr que nuestros residentes y personal vuelvan a usar como materia prima elementos utilizados y descartados anteriormente para darles un nuevo uso.

El reciclaje es algo que siempre tenemos en mente en la residencia de Taliarte Ala Norte. Pero este año hemos ido más allá con la realización de un gran Belén y varias chimeneas navideñas, las cuales fueron elaboradas con un material que siempre tenemos a mano, el cartón. Después de recopilar dicho material, la originalidad se percibía en el aire cuando se avanzaba más y más en la construcción de las partes del Belén, haciendo volar la imaginación y creatividad de nuestros usuarios, familiares y el personal del centro. El sentido del gusto, la tradición y la experiencia hicieron a nuestros usuarios los mejores profesionales, y el espíritu de la Navidad llegó ya desde comienzos del otoño.

Hay que destacar también la gran colaboración del personal auxiliar, sobre todo el de nuestra compañera María del Carmen Vega, que, con su entusiasmo en la realización de la primera chimenea, contagió a todas sus compañeras con el espíritu de la iniciativa para hacer otras similares y convertir los salones en un espacio donde nuestros usuarios respirasen la Navidad con entusiasmo y alegría.

Nuestro Belén ha sido todo un éxito porque los visitantes no podían creer que fuese reciclado por completo. Se superaron las expectativas de nuestros residentes. Hemos querido utilizar materiales reciclados para concienciar a las personas que lo visiten con la importancia de ser cuidadosos con el medio ambiente y para que valoren el gran esfuerzo que se le ha dedicado a este proyecto elaborado a mano a partir de papel y cartón.

Una reflexión sobre el consumo

El Belén se armó el 4 de diciembre con la ayuda de nuestros mayores que, con su experiencia y profesionalidad, le pusieron el toque final a esa fantástica obra de arte que se podía visitar desde la entrada de la puerta de la residencia o, como dicen ellos, la puerta de su casa.

Estos talleres surgen con la idea de provocar una reflexión sobre el consumo racional en la Navidad, al tiempo que fomentamos la clasificación adecuada de los materiales reciclados en nuestra residencia, compartiendo y promoviendo la sostenibilidad como parte de la residencia tanto en Navidad como el resto del año.

Hemos hecho un gran trabajo en equipo que nos ha despertado a muchos nuevamente el espíritu y la ilusión por la Navidad. sin nunca olvidar que debemos de hacer un uso eficiente y sostenible con los recursos de nuestro entorno.

En esta época del año, hay que recordar que nuestros mayores cuentan con un libro de sabiduría y que siempre están presentes en nuestras vidas.

 

PATRICIA MÚJICA. TASOC en la Residencia de Mayores Taliarte Norte

Concepción Pérez junto a parte de su equipo del área de Intervención Socioeducativa y de la Mujer.

Concepción Pérez: “Las guías coeducativas de SAMU van a llegar a todo el país”

El equipo del área de Intervención Socieducativa y de la Mujer de SAMU, dirigida por Concepción Pérez (Sevilla, 1976), ha puesto en marcha un proyecto de guías coeducativas para combatir la violencia de género en edades tempranas. Hasta la fecha se han enviado 20.768 guías.

—Es la segunda vez que le entrevistamos para la Revista SAMU, pero, en esta ocasión, no vamos a hablar de su trayectoria profesional, sino de un trabajo en equipo del que creo que se siente muy orgullosa, el de las guías coeducativas.
—Sí, en esta entrevista hago de portavoz, pero su contenido es el resultado de la puesta en común del equipo del área que dirijo. Y antes de comenzar, me gustaría trasladar mi eterno agradecimiento a cada uno de los miembros de mi equipo y, en especial, a Jara Díaz, por ser la persona que ha estado al frente de la elaboración, edición, seguimiento y difusión de este magnífico proyecto.

—¿Cómo y cuándo surge el proyecto de las guías coeducativas?
—Este proyecto, aunque llevaba años en mi cabeza, comenzó su andadura en 2021 y se desarrolló a lo largo de 2022 en respuesta a unas necesidades educativas identificadas, tales como el aumento de casos de violencia de género desde edades cada vez más tempranas y la creciente problemática de la ciberviolencia. La inquietud por contribuir a los fundamentos esenciales del desarrollo de niños, niñas y adolescentes, y la experiencia y especialización con la que contaba el área en el ámbito socioeducativo, nos motivó a crear un contenido adaptado a cada etapa educativa. Por ejemplo, nos centramos en que el alumnado de Educación Primaria conozca y detecte diversos tipos de violencia, fomentando la conciencia sobre actitudes adecuadas e inadecuadas, sin normalizar conductas negativas, otorgando especial importancia al empoderamiento femenino y al fomento de la capacidad para buscar ayuda cuando sea necesario.

—¿Qué necesidades detectaron en los colegios e institutos a la hora de desarrollar este proyecto?
—A pesar del admirable trabajo realizado por los centros educativos, identificamos que era necesario un refuerzo, ya que la coeducación requiere la constancia y el apoyo de diversos agentes sociales además de la escuela. Se detectaron algunos desafíos, como la mayor dificultad que tienen los niños frente a las niñas para reconocer situaciones de violencia de género, el alto porcentaje de niñas y adolescentes que han sufrido violencia sexual antes de los 15 años, las conductas basadas en el dominio y la sumisión o el uso problemático de las nuevas tecnologías. Por otro lado, el constante cambio de personal de los centros educativos y la creciente asignación de tareas burocráticas, deja a los profesores un tiempo limitado para dedicarlo a la elaboración de material de calidad en temática de violencia de género adaptado a una determinada etapa educativa, por lo que se subraya la necesidad de elaborar recursos accesibles que faciliten la enseñanza sin comprometer su calidad. Además, se detectó una falta de material adaptado a necesidades específicas del alumnado, tales como adaptación en lengua de signos, subtítulos o voz en off.

—¿Cuál fue el siguiente paso?
—Una vez detectadas estas necesidades, reconocimos la importancia de destacar y difundir este trabajo para llegar al máximo número de personas posibles. Para ello, se ha habilitado un apartado específico dentro de la página web de SAMU desde la cual cualquier persona interesada, ya sea docente o a título particular, puede acceder a esta herramienta mediante la cumplimentación de una breve encuesta, y tratar con su alumnado, hijos o hijas algo tan relevante hoy en día como es la igualdad de género, y que a veces no saben cómo afrontarlo.

—¿Por qué estas guías van dirigidas a todas las etapas educativas y no se han centrado en una etapa en concreto?
—Las guías, que son cinco en total divididas en dos bloques, se dirigen a todas las etapas educativas debido a la importancia de abordar la prevención de la violencia desde una edad temprana y adaptar el contenido a cada fase del desarrollo. Además, desde el principio, hemos contado con el respaldo de la comunidad educativa, pues tenemos constancia que destinatarios de Educación Primaria las han compartido con destinatarios de otras etapas que no estaban en nuestra lista de difusión, facilitando así su alcance. Este nivel de colaboración demuestra el compromiso compartido de la comunidad educativa para trabajar la violencia de género en todas las etapas del desarrollo educativo.

—¿Qué objetivos tienen estas guías?
—El principal objetivo es prevenir las distintas formas de violencia sobre las mujeres y la promoción de valores de igualdad, diversidad, respeto y tolerancia. Con estas guías, se conciencia al alumnado sobre la importancia de la igualdad de género, el empoderamiento de las mujeres y niñas, y se fomenta su compromiso para alcanzar estos objetivos. También se busca impulsar la reflexión crítica y el diálogo sobre los obstáculos que impiden la igualdad de género y las posibles soluciones. Pero estás guías no sólo están dirigidas a los escolares, también a profesores, padres, madres y otros familiares del entorno del alumnado.

—¿Qué temáticas tratan estas guías?
—Tratan la violencia de género, haciendo hincapié especialmente en el contexto del uso de las nuevas tecnologías; el empoderamiento; la educación afectivo sexual y los objetivos del desarrollo sostenible. Además, todo el material ha sido cuidadosamente revisado para garantizar que no contenga lenguaje sexista, estereotipos de género o cualquier otro contenido que pueda perpetuar la violencia de género o discriminar a cualquier grupo de personas.

—¿Cuántos centros educativos han recibido estas guías?
—La distribución de estas guías está siendo ampliamente superada a la de la edición anterior. En la anterior subvención, la correspondiente al 2022, las guías se distribuyeron en 28 centros de menores y recursos de jóvenes extutelados en Andalucía, así como en 73 centros de educación Infantil y Primaria e institutos en la misma región. Este año, la cobertura se ha ampliado a todo el país, alcanzando un total de 50.000 centros educativos. Este dato sigue aumentando cada día, ya que su inclusión en la página web de SAMU está generando más alcance del esperado. En la primera semana del lanzamiento, aproximadamente 200 personas, entre profesionales y familiares, accedieron a este contenido. Este aumento en la participación subraya la relevancia y la demanda de recursos educativos centrados en la prevención de la violencia de género.

—¿Qué novedades se han llevado a cabo en la edición de 2023?
—Este año nos hemos sumergido en un importante reto y estamos logrando resultados destacados. En primer lugar, estimamos que al finalizar noviembre, habremos completado la distribución de las cinco guías en todo el territorio español. Hasta la fecha, hemos enviado estas guías a un total de 20.768 centros educativos distribuidos en 10 comunidades autónomas. Aún nos falta por cubrir siete comunidades, así como los centros de menores y jóvenes extutelados de Fundación SAMU. Esto significa que la cobertura será considerablemente mayor que la del año anterior. La edición pasada se distribuyeron solo en formato PDF. Este año nos comprometimos a sacar adelante un formato audiovisual signado. Además, durante el proceso creativo, decidimos agregarles también voz y, para ellos, pedimos la colaboración de los hijos e hijas del personal de SAMU. El resultado final está siendo espectacular. Hemos conseguido hacerlas accesibles para personas sordas o con problemas de audición y para personas ciegas o con algún problema de visión.

—¿Cuál es el futuro de estas guías?
—Estas guías tienen un futuro prometedor, especialmente considerando la era de la digitalización en la que nos encontramos inmersos. Para el año 2024, nos proponemos nuevos desafíos que aún no podemos revelar, pero lo que sí es seguro es que las guías seguirán siendo objeto de una actualización constante. Nuestro objetivo final es garantizar la accesibilidad, adaptándonos a las necesidades cambiantes de la sociedad y aprovechando las herramientas digitales disponibles.

—¿Cómo se financia este proyecto?
—Lo financia el Ministerio de Igualdad por segundo año consecutivo y duplicando la partida inicialmente subvencionada. Para este año nos han concedido 85.545,17 euros. La subvención cubre la elaboración de contenido, el diseño y edición de vídeos, así como su publicidad y difusión.

—¿Qué feedback habéis recibido por parte de los centros educativos?
—Hasta el momento, hemos recibido un feedback muy positivo por parte de los centros educativos. Numerosos profesionales de la educación han destacado la utilidad y relevancia del contenido, expresando que las guías han contribuido significativamente a la concienciación y formación del alumnado en temas de violencia de género, empoderamiento, educación afectivo-sexual y objetivos del desarrollo sostenible. Este feedback positivo nos impulsa a seguir mejorando y actualizando nuestras guías para asegurar que sigan siendo una herramienta valiosa y efectiva en la promoción de valores fundamentales.

—¿Qué significa para usted y su equipo este proyecto?
—Este proyecto ocupa un lugar fundamental en nuestras prioridades, ya que representa uno de los pilares básicos de nuestra labor. Además, se destaca por ser el punto de encuentro entre las dos líneas cruciales que definen al área: la educativa y la de la mujer, por lo que es un orgullo la posibilidad de aportar nuestra experiencia y que ésta pueda ser aprovechada por la comunidad educativa (alumnado, profesorado y familias) a nivel nacional y, posiblemente, internacional, uno de los hitos marcados para el próximo año. Este proyecto no solo trata de impartir conocimientos, sino de lograr un cambio cultural y generacional, de ahí la importancia de comenzar a trabajar la coeducación desde las primeras etapas educativas, sin restarle importancia a la necesidad de continuar este trabajo en el resto de etapas, con especial consideración a la adolescencia. Es en estos años en los que se desarrolla de manera sólida la personalidad y se da la consolidación del desarrollo social y moral. Nos motiva la perspectiva de moldear una sociedad donde la igualdad de género y el respeto mutuo sean normas arraigadas. Este compromiso impulsa a nuestra área a seguir trabajando con dedicación y pasión, sabiendo que cada acción contribuye a la construcción de un mundo más justo y seguro para todas las personas.

Clausura del proyecto de Fundación SAMU ' Barrio concienciado: juventud migrante en El Cerezo'

Diez historias para cambiar mentalidades

El Centro Social Polivalente Virgen de los Reyes de Sevilla ha acogida del 20 al 24 de noviembre la exposición organizada por Fundación SAMU Historias de vida: 10 historias reales de superación. La exposición consta de 10 póster con fotografías de los protagonistas, que son jóvenes migrantes de distintas partes de África, y un pequeño esbozo de su proyecto migratorio. Cada cartel incluye un código QR que dirige al ciudadano a la historia de vida completa de cada uno de estos 10 protagonistas.

Esta muestra, con vocación itinerante, se enmarca dentro del proyecto Barrio concienciado: juventud migrante en El Cerezo diseñado por el área de Cooperación Internacional y Acción Humanitaria de Fundación SAMU y puesto en marcha por el área de Infancia y Familia gracias a una convocatoria pública del área de Cooperación del Ayuntamiento de Sevilla.

“La motivación principal de este proyecto es la de ampliar el campo de acción de Fundación SAMU en lo referente a la intervención social y la atención a personas en situación de vulnerabilidad. Fundación SAMU tiene mucha experiencia en el trabajo con personas migrantes, ya que cuenta con dispositivos de atención primaria e inmediata y, también, con centros dedicados, principalmente, a la inserción social y laboral. Sin embargo, existe una cuestión importante que es, nada más y nada menos, la comunidad de acogida. Es muy importante abordar la inserción total de estos jóvenes desde su planteamiento holístico y sistémico. Solo a través de este tipo de acciones podemos romper las barreras culturales y las ideas preconcebidas para caminar hacia una sociedad inclusiva y respetuosa”, explica Laura García Rebolo, coordinadora del proyecto de SAMU.

Los principales objetivos del proyecto Barrio Concienciado son contribuir a la sensibilización de la ciudadanía de la barriada sevillana de El Cerezo en la lucha contra la xenofobia y las desigualdades que afectan a la población migrante a través de encuentros y campañas de concienciación; y contribuir al adecuado conocimiento de la situación desfavorecida de los países de origen de los jóvenes extutelados de las organizaciones de la sociedad civil de Sevilla a través de la transmisión de sus experiencias para la población de la barriada El Cerezo, facilitando su inserción sociolaboral con enfoque de género y respeto a la diversidad.

Los chicos y chicas cuyas vidas se relatan en la exposición Historias de vida provienen de recursos de mayoría de edad de la Fundación SAMU. Son Maho Abdel Hakim Zogo, Ayoub Alioua, Amadou Sadio Bah, Ahmed Khayati, Acharf Ourraqui, Abdessadek Mounir, Abd Ellah Safi, Mohamed Hatim, Said Zitouni y Ahlam Lahmani, la única mujer del grupo.

“Estos jóvenes han sido seleccionados específicamente porque se trata de un trabajo complicado y duro. Explorar en la trayectoria migratoria de una persona no es fácil, supone retrotraerse a momentos de dolor y sufrimiento, recordar situaciones traumáticas y hacer frente al hecho de que se encuentran solos en este país, muy lejos de su familia, y con la enorme carga y responsabilidad de hacerse un hueco en la sociedad española para poder contribuir económicamente con aquellos que dejaron atrás para que puedan acceder a una vida mejor”, comenta Laura García.

“Estos chicos viven actualmente en diferentes recursos de Fundación SAMU, tanto en centros de inserción sociolaboral como en los pisos tutelados JEM. Muchos de ellos han pasado previamente por otras instituciones, no solo en Andalucía, sino también en Cataluña, Navarra y País Vasco, por ejemplo. Sin embargo, se marcharon de esos recursos porque no encontraban el respaldo adecuado. Finalmente, fue Fundación SAMU donde encontraron la cobertura con la que se sienten realmente cómodos y protegidos, tanto a nivel documental, como social y laboral”, continúa Laura García Rebolo.

Los diez protagonistas de la exposición siguen vinculados a SAMU a través de alguno de sus recursos o programas de mayoría de edad, pero la coordinadora del proyecto asegura que son muchos los jóvenes que, tras finalizar su estancia en SAMU, continúan en contacto con la entidad y sus orientadores y educadores de algún modo. “Para estos jóvenes, muchos de los profesionales de SAMU son referentes, no solo a nivel de apoyo logístico y de la vida cotidiana, sino también de vínculo afectivo. Muchos de estos jóvenes nos llaman para pedir consejos cuando ya están independizados o para contar algún logro, incluso nos envían fotografías de sus hijos recién nacidos, lo cual constituye un acontecimiento muy emocionante para todas las partes”.

“Personalmente, este proyecto ha supuesto un reto y ha actualizado muchas de mis habilidades profesionales. Son muchos años los que llevo en la intervención directa, 25 para ser exactos, pero hacía bastante tiempo que no lo estaba en el enfoque comunitario”, reconoce Laura García Rebolo, coordinadora del proyecto.

“Al principio sentí un poco vértigo y una gran responsabilidad, era para mí muy importante estar a la altura con la Fundación, ya que éste es el primer proyecto de Educación para el Desarrollo que se realiza con el Ayuntamiento de Sevilla y había que dejar muy claro los niveles de profesionalidad y desempeño que nos caracterizan Por otro lado, el proceso de Historias de Vida ha sido duro, pues tener que bucear en recuerdos y vivencias tan duras como puede ser lanzarse al mar en mitad de la desesperación cuando se tienen 15 años no es algo sobre lo que se pueda pasar de puntillas. He tenido momentos en la redacción de las historias que me tenía que parar y levantarme para no llorar. Porque los conozco, porque he convivido con algunos de ellos, he visto día a día su sonrisa, sus enfados, sus enormes esfuerzos por mejorar, por integrarse con garantías a pesar de muchas dificultades, y todavía eso me dolía más. Claro que son historias de superación, dignas de ser gritadas a los cuatro vientos. Y me siento muy orgullosa de que SAMU haya confiado en mí para la coordinación de este proyecto”, relata García.

Así, a lo largo de los diez pósteres que componen la exposición, se cuenta cómo fueron los hermanos mayores de Acharf Ourraki los que, después de una dura decisión familiar, juntaron el dinero para pagar el transporte del joven hasta España. Emprendió el viaje desde Casablanca hasta Ksar Sghir donde después de esperar 12 horas escondido, junto a otros tres chicos más fue transportado oculto entre grandes paquetes hasta el puerto de Algeciras y, días después, fue detenido por la Policía mientras dormía en un parque de Sevilla a la intemperie.

También se habla de cómo el padre de Ahlam Lahmani la coló sin pasaje en una embarcación en la que también iba su hermano y le pidió que se ocultara la melena para que todos creyeran que era un chico y no una joven menor de edad, que, el miedo que sentía, la paralizó cuando llegó a las costas españolas. O cómo Abdesadek Mounir, después de lograr llegar a España tras varios intentos y decepciones (le robaron el dinero que tenía para pagar su hueco en la embarcación), se está formando como cocinero en la Fundación Cruzcampo.

Esta exposición ha estado abierta al público en el Centro Social Polivalente Virgen de los Reyes del 20 al 24 de noviembre. Éste último día se celebró un acto de clausura de la propia muestra y del proyecto Barrio concienciado: juventud migrante en El Cerezo en el que participaron, entre otros, José Antonio Trujillo, director general adjunto de SAMU; Juan Manuel Aveledo, director del área de Infancia y Familia de SAMU; y José Luis García, delegado del área de Cooperación del Ayuntamiento de Sevilla.

Durante el acto, Juan Manuel Aveledo realizó una breve presentación de la labor y acciones llevadas a cabo desde el área de Infancia y Familia de SAMU, y Laura García Rebolo presentó los resultados del proyecto que se clausuraba. Finalmente, uno de los protagonistas del proyecto de Historias de Vida y el presidente de la Asociación El Itihad leyeron un manifiesto a favor de la inclusión de los jóvenes migrantes.