SAMU, en el fragor de la maratón de Sevilla
Más de 140 profesionales de la sanidad y las emergencias sanitarias entre médicos, enfermeros, Técnicos de Emergencias Sanitarias (TES), Técnico en Cuidados Auxiliares de Enfermería (Tecae), fisioterapeutas y personal en formación en Escuela SAMU, además de 30 vehículos, formaron parte del dispositivo sanitario de SAMU en la XXXVII edición de la Zúrich Maratón de Sevilla, una de las pruebas más prestigiosas y multitudinarias del panorama nacional.
Una edición más, el equipo de SAMU estuvo al cuidado de los casi 11.000 participantes de la maratón, en coordinación con los servicios de emergencias del Ayuntamiento de Sevilla, para garantizar una rápida respuesta rápida y eficaz en las situaciones de emergencias en todo el recorrido por el centro de la ciudad, y ofrecer asistencia sanitaria a los propios corredores.
El dispositivo estuvo bajo el mando de Juan González de Escalada, director de área de Emergencias de SAMU. El objetivo del mismo era no solo intervenir en la atención a deportistas, sino también en cualquier escenario de emergencias que pudiera producirse, como una avalancha o un atentado terrorista.
Los objetivos específicos de esta misión eran: valorar, planificar y gestionar el dispositivo; asegurar la primera respuesta; establecer el marco organizativo y funcional con una adecuada coordinación; montar y operar un área de Puesto de Mando; disponer de recursos móviles a demanda; desarrollar una red de cardioprotección a través de todo el circuito; desplegar una malla de transmisiones; establecer un mecanismo de integración con otros servicios y diseñar una operativa especifica de SAMU.
Fuentes del dispositivo señalaron que no se produjeron incidentes de gravedad durante el transcurso de la prueba. A falta de la elaboración del informe final, se registraron alrededor de una decena de derivaciones hospitalarias que se resolvieron con éxito y con los deportistas de alta pocas horas después.
Como en pruebas de estas características, predominaron las hipotermias, la deshidratación, los síndromes gastrointestinales y los problemas musculoesqueléticos, todas ellas situaciones provocadas por el esfuerzo extremo al que se somete al organismo en una maratón, tanto en deportistas de alto nivel como en deportistas amateur.
Hospital de campaña
Los recursos materiales estuvieron organizados en dos grandes grupos. En primer lugar, el hospital de campaña instalado en el Conservatorio de Danza Antonio Ruiz Soler de Sevilla para prestar asistencia sanitaria tanto a los corredores como al público del evento, y que se convirtió en epicentro de la operativa. En el segundo grupo, figuraba un enorme despliegue de recursos móviles repartidos a lo largo del circuito de 42 kilómetros, con hasta 30 vehículos de asistencia.
Dos años después de la anterior edición (pues el de 2021 no se disputó por la pandemia), el Zurich Maratón de Sevilla volvía esta edición con el propósito expreso de los organizadores de mejorar las dos plusmarcas de la prueba y los dos récords nacionales de la distancia, objetivos que finalmente se cubrieron casi en su totalidad.
Los etíopes Asrar Abderehman (2:04:43), en hombres, y Alemu Megertu (2:18:51), en féminas, se proclamaron campeones batiendo los registros de la prueba, mientras que el español Ayad Landassem acabó sexto y estableció una nueva plusmarca nacional de la distancia (2:06:25).